Realeza

La foto de Lady Di que desató la furia del príncipe Carlos: ella estaba en un oscuro momento

Diana siempre fue una rebelde de la realeza.

ARCHIVO – Diana, la princesa de Gales, durante una recepción ofrecida por el presidente de Alemania Occidental Richard von Weizsacker en honor a los huéspedes reales británicos en Godesberg Redoute en Bonn, Alemania, el 2 de noviembre de 1987. La mue AP (Herman Knippertz/AP)

La princesa Diana siempre fue identificada por romper con todos los protocolos y estereotipos de los miembros de la realeza. Esto no era algo agradable para la reina Isabel II y el entonces príncipe Carlos.

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Sin embargo, hubo una situación en específico que colmó la paciencia del heredero de la corona y es que el momento no solo generó revuelo dentro de la familia real, sino que se convirtió en un momento mediático internacional.

Todo ocurrió durante un evento de la realeza, la madre de los príncipes William y Harry se quedó dormida y fue fotografiada, imagen que le dio la vuelta al mundo.

La fotografía todavía es una de las más icónicas de Lady Di y es que se muestra con un amplió vestido en tono lila con un llamativo collar de perlas y un hermoso estilo, pero lo que realmente llamó la atención es que la princesa estaba en un profundo sueño.

Esta imagen generó duras críticas de parte de quienes exigían la seriedad de una importante miembro de la familia real británica, sin embargo para otros solo causó ternura, y es que el momento durmiendo no le restó nada de belleza a la princesa.

La princesa Diana generó conflictos dentro de la realeza

“La Bella Durmiente” fue el nombre con el que la prensa selló el momento y, aunque parecía una situación muy inocente y humana, para el príncipe Carlos resultó un escándalo inaceptable.

Esto se sumaba a una serie de comportamiento que no le agradaban al príncipe ni a la reina, pues Diana se había vuelto muy cercana con el pueblo y la prensa le daba toda la atención.

Cualquier acción llamativa resultaba un insulto para la corona, sin embargo ella mantuvo su personalidad cálida y cercana, por lo que fue considerada “La Princesa del Pueblo”.

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