Corría el año 1998 cuando se estrenó la telenovela juvenil Soñadoras, una exitosa producción que Aracely Arámbula, Michelle Vieth, Angélica Vale y Laisha Wilkins protagonizaron.
Tras su lanzamiento, el melodrama de Televisa acaparó el gusto del público con las aventuras y desventuras de cuatro ingenuas estudiantes de preparatoria: Jacqueline, Lucía, Julieta y Emilia.
Esta última era una muchacha centrada y romántica cuyo mayor sueño era convertirse en una bailarina profesional, un anhelo que no apoyaba su madre, quien quería que fuera cantante.
En la trama, Emilia se inscribe en una academia de baile a escondidas de su progenitora. Dentro de este lugar, conoce a un bailarín y coreógrafo llamado Enrique y se enamora de él.
Sin embargo, aunque es recíproco, este enamoramiento causa conflictos para la joven de apellido González. Y es que ella ya sostiene una relación con Gerardo, un cantante de rock.
Dentro de este proyecto, Wilkins se encargó de darle vida a esta soñadora. En aquella época, la actriz apenas estaba dando los primeros pasos de su carrera y alcanzó la fama con esta ficción.
Desde entonces, han pasado 24 años en los que mucho ha cambiado en la vida de esta estrella.
El cambio de Emilia González de Soñadoras
En la actualidad, la actriz y presentadora mexicana tiene 45 años de edad, se ve mejor y más feliz que nunca y se encuentra retirada de la actuación desde hace casi un lustro.
Tras finalizar las grabaciones de Soñadoras en el año 1999, la artista continuó imparable edificando su trayectoria como actriz en todos los escenarios posibles.
En la televisión, desde la última vez que encarnó a Emilia, la histrionisa ha demostrado su talento encarnando toda clase de personajes en 16 producciones. En su mayoría, telenovelas.
Bajo la misma piel (2003-2004), La fuerza del destino (2011), Tres veces Ana (2016) y La candidata (2016-2017) son algunos de los melodramas en los que ha actuado; según Imdb.
En el cine, por otro lado, debutó en la película Mejor es que Gabriela no se muera en 2007. Posteriormente, tuvo actuaciones en varias cintas, tales como The Zwickys (2014).
Mientras, en el teatro, ha desplegado sus alas artísticas formando parte del elenco de varias puestas en escenas, como Una pareja con Ángel o Los caballos fueron cobardes.
Sin embargo, aunque parecía que seguiría cosechando éxitos de manera indetenible en el mundo de la actuación tras estos proyectos, la actriz puso en pausa su exitosa carrera en 2018.
Su última aparición como intérprete fue en un episodio de la serie de antología Descontrol el mismo año en el que decidió retirarse de manera indefinida del medio artístico.
¿Por qué se retiró Laisha Wilkins?
Sobre los motivos detrás de esta decisión, Laisha no habló sino hasta el año pasado, cuando compartió en redes sociales que la razón por la que dejó de trabajar era un problema de salud.
A través de su cuenta en Twitter, la artista abrió su corazón sobre este complejo momento en su historia que la llevó a alejarse de todo para poder enfocarse en recuperar su bienestar.
“Hace tiempo estuve enferma, pesaba 44 Kg, mido 1.70, no podía ingerir alimentos ni absorbía nutrientes”, comenzó a explicar junto a un par de retratos suyos que mostraban su ayer y hoy.
“Mi salud se deterioró, dejé de trabajar y me dediqué a mi salud”, develó. “Hay gente que lucra con las fotos de esa época y hace burla, dan pena. Lo importante: ¡hoy estoy sana y feliz!”.
Meses antes de la revelación, había regresado a la televisión como una de las conductoras de La caja de Pandora, un proyecto televisivo que se mantuvo al aire hasta comienzos de 2021.
Actualmente, la eterna Emilia de Soñadoras se desempeña como columnista en Opinión 51 y es conductora de Los despabiladores, un programa virtual de La Lista News emitido en YouTube.
En cuanto al plano personal, Laisha Wilkins mantiene su vida íntima estrictamente al margen de su vida profesional por lo que no se tienen detalles al respecto.
No obstante, la conferencista sigue activa en las plataformas sociales como Instagram, en donde comparte vistazos de su vida, su carrera, aficiones y presume su belleza sempiterna.