Lily Collins no solo es mundialmente conocida por el talento actoral que ha demostrado en producciones como Emily en París, sino también por su sensacional sentido de la moda.
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Ya sea en la alfombra roja, una gira de medios o una cita casual con su esposo, el director Charlie McDowell, la intérprete siempre luce impecable en estilismos elegantes y modernos.
Así lo hizo la mañana de este martes 22 de marzo al visitar los estudios de CBS en Nueva York luciendo despampanante en un look con el que se reafirmó como inspiración estilística.
Lily Collins es la elegancia con conjunto caqui en Nueva York
De acuerdo a Daily Mail, la intérprete de 33 años fue captada mientras abandonaba las instalaciones de la cadena televisiva en un fabuloso conjunto caqui de Awake Mode.
El ensamble de Collins para cumplir con sus compromisos profesionales estaba compuesto por dos prendas originales confeccionadas en lana beige con originales detalles intrincados.
La primera se trataba de una blusa doble asimétrica, con mangas camiseras anchas y cinturón envolvente conformada por dos partes que pueden usarse juntas, como Lily, o por separado.
Por otro lado, la segunda pieza y la que completaba el traje en tono neutro era una elegante falda midi doble deconstruida y con abertura delantera y trasera que le sentó de fantasía.
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Bajo dirección de sus estilistas, Rob Zangardi y Maiel Haenn, elevó el set con unos zapatos de tacón en beige semitransparente, con puntera afilada y correas marrones de Andrea Wazen.
La estrella de Windfall complementó su outfit con aretes de oro y un set de anillos de Cartier. Así como un minibolso cuadrado negro con cadena dorada para cargar sus pertenencias.
En cuanto beauty look, la artista británico-estadounidense se decantó por dejar su melena suelta en ondas glamorosas y un maquillaje en el que destacaron sus labios en rojo brillante.
Horas después de esta aparición, la también hija de Phil Collins compartió un trío de fotos en su perfil de Instagram en donde modela el ensamble junto a la figura dorada de un perro.
De esta manera, con esta apuesta sobria y audaz, Lily Collins no solo probó ser una maestra en cuanto estilo, también recordó la infalibilidad de los colores neutros para ser la más chic.
