El 2020 fue un año que sin duda marcó a Violeta Isfel de muchas formas ya que fue el momento ideal para salir de su zona de confort y atreverse a cumplir uno de sus sueños: tener su propio negocio.
A los largo del año, la actriz nos mostró su proceso para poder abrir Isfelburguers, restaurante de hamburguesas que inició en la cocina de su casa.
«Fue un antojo, yo traía antojo de hamburguesa de carrito. El problema fue que en plena pandemia no había. Me puse a ver varios tutoriales para ver qué se necesitaba y encontré muchas recetas pero ninguna que cumpliera con lo que me gusta. Entonces decidí hacerla de cena, la preparé como de carrito y el primero que dio la mordida fue mi hijo y me dijo qué onda esto está buenísimo (…) Para mí la cocina es un arte. Superó mi propia expectativa que ni yo me la podía creer. Fue él quien me dijo que empezara a venderlas», dijo en una entrevista con el portal Badabun en aquel momento.
Gracias a la popularidad y prestigio que adquirió, Violeta consiguió lo necesario para abrir un primer local y así hasta tener su establecimientos en varios puntos de la ciudad.
Por desgracia, casi dos años después, la pandemia sigue causando estragos, afectando el emprendimiento de Violeta.
Fue a principios de 2022 que anunció que debido a las deudas, tenía que “poner en pausa” el local ubicado en Tizayuca.
“Tuvimos que poner una pausa porque subieron las rentas como si no hubiera mañana. Se vuelven imposibles de pagar. Eso nos ha mermado un poquito”, comenzó explicando al programa de televisión De primera mano.
Esto, sumado a otras situaciones, ha causado estragos en su salud mental pero ella se ha mostrado transparente con respecto a su proceso.
En febrero, la villana consentida de “Atrévete a Soñar” confesó que había estado atravesando momentos muy complicados debido a la depresión que le diagnosticaron.
“En cuanto escuché esa palabra me espanté muchísimo. Yo pensé que como siempre era super positiva y alegre, era imposible que me pasara, pero no tiene que ver con eso. Ahí entendí que hasta la gente más positiva y feliz puede tener un vacío adentro cuyo nombre es depresión”, explicó en una entrevista con Las Estrellas.
Pero sin saberlo, Violeta estuvo luchando mucho tiempo contra esta situación. Según mencionó, todo empezó a acrecentarse con el inicio de la pandemia, entre la crisis económica y sanitaria y la presión que sentía por tener que solucionar todo sola.
“Me puse extremadamente proactiva, y todos sabemos que nada de eso en exceso es saludable. Nunca me di chance de sentarme y decirme a mí misma: ‘me siento mal’, ‘estoy alterada’ o ‘estoy triste. No me di chance de ver que camión me arrolló, porque solo estaba pensando en como sacar adelante a mi familia”, dijo.
El proceso de sanación de Violeta
La actriz no ha tenido una vida fácil pero la forma en la que ha sobrellevado la adversidad la ha convertido en un ejemplo a seguir para muchas mujeres.
La actriz confesó también que los intentos fallidos de un segundo embarazo también hicieron que se viniera abajo.
A pesar de lo difícil que puede ser el diagnóstico de una depresión, ella no dudó enacudir con un especialista en salud mental y compartir su experiencia con los fans.
Violeta aseguró lo importante que fue para ella hacer una introspección de lo que estaba sintiendo y aquellas emociones que estaba reprimiendo.
Una de las conclusiones a las que llegó fue que “está bien no estar bien” pues todos tenemos derecho a experimentar de vez en cuando emociones no tan positivas. También recalcó la importancia de tener una rutina.
“Parte de mi tarea es obligarme a despertarme temprano, levantarme de la cama aún si no tengo ganas de hacerlo, meterme a bañar todos los días y arreglarme aunque no tenga que ir a ningún lado. Ponerme bonita sólo para mí me ayuda un montón”, dijo.