Laura Londoño está atravesando un momento de ensueño en su carrera gracias al tremendo éxito internacional que ha cosechado la última versión de Café con aroma de mujer.
PUBLICIDAD
Desde su llegada a Netflix, la telenovela que encabeza con William Levy ha conquistado usuarios al punto de convertirse en una de las producciones más vistas de la plataforma en lo que va del año.
No obstante, aunque Londoño y Levy enamoran a espectadores en el melodrama con el romance que viven en la piel de “Gaviota” Suárez y Sebastián Vallejo, esta relación solo existe en la ficción.
En la vida real, el corazón de la intérprete colombiana tiene otro dueño.
La pareja en la vida real de Laura Londoño, “Gaviota” en Café con aroma de mujer
Desde hace casi una década, la talentosa estrella vive un romance que supera por mucho al de las telenovelas con su esposo, el reconocido cineasta colombiano Santiago Mora Bahamón.
Laura y Santiago se conocieron en el Festival Internacional de Cine de Cartagena de Indias (FICCI) en el año 2012 tras ser presentados por una amiga en común, la actriz Juanita Arias.
De acuerdo a la revista Fucsia, los dos tenían pareja en aquella época, pero forjaron una buena amistad. Un año después, los tres coincidieron en el mismo evento y Arias los volvió a presentar.
PUBLICIDAD
En ese momento, ambos estaban solteros, pero la relación permaneció amistosa por un tiempo más.
“Cuando regresamos a Bogotá, empezó a hablarme para temas de trabajo (él estudió cine y fotografía)”, comenzó a contar la estrella al medio.
“En ese entonces me acababa de pasar a mi apartamento de soltera y pensaba regalarme una foto; luego me habló de un video en el que quería que participara... charlábamos muy seguido. Nada de eso pasó”, acotó.
Laura Londoño confesó creer que todo esto fue tan solo un pretexto para poder aproximarse a ella que sí funcionó.
“Un día cualquiera decidimos salir y cuando concretamos la cita algo en mí cambió; me sentí emocionada. Desde ese momento ha sido un amor superbonito. A los seis meses nos fuimos a vivir juntos (…)”, agregó.
“¿Quieres ser mi princesa para toda la vida?”
Tres años después de estar viviendo juntos en un romance idílico, la pareja volvió a asistir al festival de cine cartagenero para protagonizar otro momento que marcaría su historia de amor.
Y es que, una tarde como cualquiera en las Islas del Rosario, Santiago le pidió matrimonio a Laura. “Me dijo: ¿Quieres ser mi princesa para toda la vida? A los dos nos cogió la risa nerviosa”.
“Yo solo pensaba que el anillo, que estaba en uno de sus dedos, no fuera a caerse al fondo. Nos abrazamos por un largo rato y luego le dije: ¿Es que no me lo vas a poner?”, rememoró a la revista sobre la proposición en medio del mar.
Laura Londoño no creía en el matrimonio
Lo curioso es que, antes de conocer a su marido, Londoño no creía en el matrimonio. Algo que le dejó muy claro a Mora Bahamón cuando comenzaron a salir.
“No me quiero casar, no creo en el matrimonio; tampoco en las parejas ni en la fidelidad. Y no quiero tener hijos”, recordó que le reveló en una cita cuando todavía no eran novios.
Según contó al medio citado, sus padres terminaron su relación cuando ella tenía 11 años y los amigos de su infancia vivieron experiencias similares por lo que creció “con esa información”.
En ese momento, ante esa dosis de sinceridad, Santiago reaccionó con suma tranquilidad. “Yo, en cambio, quiero todo lo contrario: una familia, tener hijos y establecerme”, le contestó.
Laura reconoció que quedó perpleja ante la réplica. “Es un hombre muy atípico; parecía como si hubiéramos intercambiado roles… ellos son, usualmente, los que le huyen al compromiso”.
“Nunca soñé con entrar de blanco a una iglesia; ese nunca fue mi deseo. Yo era todo lo contrario: solo pensaba en mí, mi libertad y mi espacio”, destacó.
De esta manera, su amor genuino con el profesional de la fotografía la llevó a deshacerse de muchos preconceptos que antes de su relación defendía con todas sus fuerzas.
“Con él supe que sí es posible, que existen parejas que perduran; son pocas, pero existen”, compartió a la revista.
“¡Sí, acepto!”
Finalmente, tras 5 años de noviazgo, la pareja se dio el “sí” en una íntima ceremonia el 7 de diciembre de 2018 en un jardín de San Andrés con la playa fondo, lejos de las convenciones y con una novia vestida de rosado.
Por supuesto, su matrimonio también estuvo acompañado de una profunda reflexión pues no quería solo firmar un papel. “Para mí esto significa mucho más que la fiesta, las fotos y que los invitados hablen durante días de lo que pasó”, añadió.
“Desde la propuesta (…) hemos estado inmersos en un proceso para entender qué es lo que significa el matrimonio para cada uno, porque creemos que hablamos el mismo idioma y resulta que a la hora de la verdad tenemos conceptos diferentes de la misma palabra que usamos”, señaló.
Una sólida familia
Antes de su boda, Londoño además confesó a la revista que había cambiado de opinión con respecto a la maternidad desde su relación con su entonces prometido y quería tener hijos con su Sebastián Vallejo de la vida real.
“Yo quiero tener hijos con él, quizás no había llegado la persona que me lo despertara. Él no solo cambió eso: ha barrido, en conclusión, un montón de prejuicios que tenía (…)”, destacó sobre el amor de su vida.
En septiembre del año 2019, este sueño de los dos se materializó con el nacimiento de su primera hija juntos: Allegra.
Actualmente, los también empresarios y socios se encuentran en la dulce espera de su segundo bebé: una niña que llamarán Mikaela, según reveló la eterna “Gaviota” a través de las historias de su perfil en Instagram.
De esta manera, consolidados como una de las parejas más sólidas y con una hermosa familia, la actriz y el cineasta prueban que el amor verdadero sí existe fuera de las telenovelas.