Dueña de un talento innato, una indiscutible belleza y un gran carisma, Laura Londoño está consolidada como una de las actrices más famosas, respetadas y queridas de Colombia.
Con una disciplina, pasión y perseverancia, la histrionisa se ganó su lugar en el mundo de la interpretación en donde ahora triunfa por su trabajo en el remake de Café con aroma de mujer, una ficción que arrasa en Netflix.
No obstante, para llegar a probar las mieles del éxito que disfruta hoy, la estrella ha recorrido un camino de más de tres lustros para cumplir el sueño que nació en su corazón en su niñez.
La transformación de Laura Londoño a lo largo de los años
Laura Londoño nació el 13 de febrero de 1988 en Medellín, Colombia. A pesar de que sus papás no estaban relacionados al mundo del entretenimiento –un ingeniero y una abogada–, ella descubrió su vocación hacia las artes desde temprana edad.
Motivada por esta inclinación, comenzó a tomar clases de diversas disciplinas artísticas en su infancia. Estudió en la Escuela de Bellas Artes de Medellín; hizo cursos de pintura, arcilla y cerámica. Asimismo, cursó canto, teatro, música, solfeo, piano y ballet; recoge la revista Aló.
Además, tuvo sus estudios convencionales en el colegio Isolda Echavarría. “Era un centro con un marcado enfoque artístico y espiritual. Me ayudó a relacionarme con el mundo a través del arte y desde la sensibilidad”, dijo a Diez Minutos.
A pesar de comenzar a curtirse desde pequeña en las artes, sus comienzos en el mundo del espectáculo no los hizo como actriz sino como modelo en su adolescencia, un trabajo que realmente no le interesaba, pero le permitió tener su primera experiencia en el medio.
Su carrera en el modelaje comenzó en Colombia, pero luego la llevó a Francia por un breve periodo. “Estuve seis meses viajando por Europa feliz, a los 16 años, con el tema del modelaje que nunca me había realmente interesado”, recordó a la revista Diners.
“Era más una oportunidad de generar una independencia económica y por ende emocional, pero también la oportunidad que me daba de viajar desde muy chiquita, hacer cosas de trabajo por fuera. Así que cuando me fui, lo vi más como con cara de viaje que con interés de ser modelo”, señaló.
El giro del destino que la llevó a sumergirse de lleno en la actuación
Tras esta experiencia, Laura regresó a su país a finalizar sus estudios en el colegio. Al terminar su educación, enfrentó una crisis cuando le tocó decidir a qué se iba a dedicar por el resto de su vida.
“Cuando terminé el colegio, estaba en ese punto en el que uno piensa ‘¿qué voy a estudiar?, ¿qué voy a hacer? ¡Me toca elegir y tengo que dejar tantas cosas de lado...!”, rememoró en conversación con Fucsia.
Todavía confundida, eligió estudiar arquitectura. Sin embargo, solo vio una clase. Y es que, en lo que podría explicarse como una jugada del destino, justo después la llamaron de la escuela de actuación de Caracol Televisión para informarle que la habían aceptado.
Ante esto, decidió asumir el riesgo y seguir su corazón hacia el mundo de la actuación. En dicha escuela estuvo durante dos años, pero la oportunidad de debutar en la televisión le llegó cuando apenas comenzaba sus estudios gracias al primer casting que hizo en el canal.
El debut de Laura Londoño en la televisión
De acuerdo a Imdb, su estreno como actriz en la pequeña pantalla lo tuvo con un rol menor en la novela Las profesionales, a su servicio, una producción estrenada en 2006, cuando la novel artista tenía alrededor de 18 años.
A posteriori, según relató a Fucsia, se sumó al elenco de una obra teatral con la que no solo se presentó en varias partes del mundo, además pudo confirmar su profundo amor y pasión por la actuación. De vuelta al país, comenzó a encadenar papeles en la TV.
Victoria (2007-2008), Sin senos no hay paraíso (2008-2009) y El Cartel (2008) fueron los proyectos en los que comenzó a abrirse camino en la pantalla chica. No obstante, en sus inicios, encarnar un papel que realmente no quería la llevó a desanimarse con la actuación.
“Pensé que ya no me gustaba, así que me fui de viaje seis meses para Australia, sola, a pensar; me di cuenta de que me encantaba, pero debía estudiar más si quería alcanzar esos papeles, personajes, historias, directores y entornos que realmente deseaba para mí. Así que viajé a Nueva York para seguir aprendiendo, y allí permanecí tres años”, contó a Fucsia.
En la meca del teatro, Londoño estudió en la academia de Lee Strassberg. En su regreso a Colombia, estuvo imparable ligando papeles soñados en una producción tras otra, como La bruja, El capo, Comando Élite, Cumbia Ninja y Rafael Orozco, el ídolo.
En esta última, estrenada en 2012, brilló gracias a su destacada actuación como la antagonista Silvia Duque. De hecho, por esta interpretación, se alzó con una nominación a los Premios India Catalina en la categoría mejor actriz antagónica de telenovela o serie.
El protagónico con el que se robó los corazones de los colombianos
Posteriormente, la también actriz de teatro se sumaría al elenco de más proyectos que le darían reconocimiento, tales como Bloque de búsqueda (2016), una ficción en la que encarnó uno de sus personajes más queridos y desafiantes: la sargento Olga Diez.
Sobre este teledrama, dijo al medio antes citado: “Me encantó, me sentí orgullosa. Supe, además, con seguridad, que esto sí era, que sí podía”.
Después de este reto, llegaría a su vida el papel protagónico que tanto había soñado: Julia Escallón en la exitosísima telenovela La ley del corazón, un rol con el que se robó por completo el corazón del público colombiano y se consagró como actriz en la televisión.
“Julia era el escalón que faltaba. La gente ahora me reconoce como Laura, y no como alguno de mis personajes. Es el papel que siempre había esperado. Hay roles con los que tú floreces más que con otros, pero es que el personaje de Julia es divino”, dijo a Fucsia.
La producción, transmitida entre los años 2016 y 2019, acaparó por completo el gusto de las audiencias y la catapultó al estrellato. Además, su trabajo fue reconocido con el premio TVyNovelas a la mejor actriz protagónica de telenovela en el año 2017.
Tras este melodrama, siguió actuando en un proyecto apasionante tras otro. Narcos, Paraíso Travel, De brutas, nada y el último remake de Café con aroma de mujer son las producciones más recientes en las que ha derrochado su talento.
En esta última, con la cual se encuentra cosechando triunfos desde su estreno el año pasado, le ha brindado la mayor proyección internacional en su carrera. Además, no solo tuvo la oportunidad de mostrar sus dotes como actriz, también su talento para cantar.
También ha brillado en el cine y el teatro
A la par de su trabajo en televisión, Laura Londoño ha destacado en el cine como parte de varios largometrajes, como El último aliento, Pablo, Loco por vos, El olvido que seremos y Escobar: Paradise Lost. Dentro de la última, lanzada en 2014, compartió créditos con el oscarizado actor Benicio del Toro.
Hoy en día, más que consolidada como actriz y creciendo en popularidad en todo el mundo gracias a Café con aroma de mujer, la estrella de 33 años es el claro ejemplo de que con constancia, entrega, disciplina y persistencia se pueden cumplir todos los sueños y hasta más.