La maternidad soñada puede convertirse en un proceso lleno de dificultades para muchas mujeres, especialmente para aquellas que han sufrido pérdidas.
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Así sucedió con la ex Miss Universo, Ximena Navarrete, quien en 2018 dio a conocer que estaba embarazada pero poco después anunció que el corazón de su bebé “había dejado de latir”.
La modelo se sometió a un tratamiento de reproducción asistida y dos años después volvió a quedar embarazada. “Mi cielo se pinta de colores con el arcoíris más deseado y esperado de mi vida”, escribió Navarrete, haciendo referencia a los llamados “bebés arcoíris”.
Los bebés arcoíris son aquellos que nacen después de un aborto espontáneo, un mortinato o una muerte neonatal y según la creencia popular, reciben ese nombre porque es como un arcoíris que sale después de una tormenta.
La pequeña Ximena, como nombró a su primogénita, finalmente nació el 8 de diciembre de 2021. “Bienvenida mi niña ! Te amo con toda mi alma 🤍 mi universo entero gracias Dios. #XimenaValladaresNavarrete @jcvalladares 3. 970 kilos de puro amor !”, escribió Ximena en la publicación donde presentó a la bebé.
Según informó la revista ¡Hola!, Ximena nació por cesárea en un hospital de San Luis Potosí, México. Tanto Juan Carlos Valladares como Ximena Navarrete compartieron fotos de su bebé pocas horas después de que nació.
Navarrete explicó que antes de lograr este segundo tenía una reserva ovárica limitada por la edad pero con la guía de un ginecólogo, finalmente pudo embarazarse manera asistida. Ahora la modelo ha exhortado a las mujeres jóvenes que desean ser madres pero postergar el tiempo, a informarse sobre lo que es la congelación de óvulos y la reproducción asistida.
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Las cosas no fueron fáciles para ella pero dicen que “después de la tormenta, viene la calma” y de ahí que siguió luchando por conseguir su sueño de convertirse en mamá.
Un bebé arcoíris trae gran alegría después de una vivencia tan dolorosa y simboliza la esperanza y la sanación.
Es una experiencia extremadamente emocional y devastadora perder un bebé, después de todo, es una vida que creaste y que se empezó a formar en tu interior.
Los bebés arco iris a menudo se describen como bebés “milagrosos” debido al poderoso impacto que pueden tener en la vida de los padres que perdieron un hijo antes. Su llegada ayuda en el proceso de sanación aunque siempre un embarazo de un bebé arcoíris puede traer fuertes sentimientos de ansiedad, miedo e incluso culpa.
Las emociones son contradictorias ya que por un lado quieres honrar a ese bebé que ya no está pero al mismo tiempo, estás celebrando la llegada de otro. El duelo por una pérdida mientras se celebra una nueva vida son comunes con el nacimiento de un arcoíris.
A lo largo de su segundo embarazo, Ximena recibió mucho apoyo de su esposo, familia y amigos pero sus seguidores también fungieron un papel importante al darle ánimos y compartir sus vivencias con ella. Tener esa red de apoyo es esencial cuando estás viviendo un proceso similar.
Incluso después de dar a luz de manera segura a tu bebé arcoíris, pueden llegar esos recuerdos y pensamientos del primer bebé. Compartir su historia y saber que no estás sola puede ser reconfortante. A medida que ese bebé arcoíris crece, asegúrate de compartir su historia con ellos. Hazle saber lo especial que su llegada fue para ti.
Es válido sentirte abrumada y con tantas emociones encontradas pero también es algo agotador. Recuerda que siempre puedes trabajar de la mano de un consejero o un profesional de la salud mental para que recibas la atención adecuada.