La fama no siempre es tan glamorosa fuera de lo que vemos en redes sociales. Ésta se pude convertir en un arma de doble filo que le ha costado a muchos su felicidad. Porque no todo son cumplidos y a veces, el precio que se paga es muy alto.
Estas famosas parecían tenerlo todo pero tomaron el camino equivocado, cayendo en adicciones y enfrentando problemas legales. Por suerte, ras enfrentarse a sus propios demonios, lograron salir adelante y poco a poco han retomado su lugar en la cima.
Lindsay Lohan
Lindsay era una de las estrellas infantiles y juveniles favoritas en los 90s y principios de los 2000. A pesar de que tenía todo para convertirse en una de las grandes de Hollywood después de protagonizar cintas exitosas como The Parent Trap., Freaky Friday y Mean Girls, una vida de fiesta y adicciones la llevaron a caer en desgracia rápidamente.
Lohan fue arrestada varias veces por conducir bajo los efectos del alcohol en 2010, y también fue acusada de hurto mayor en 2011. También su aspecto comenzó a deteriorarse entre supuestas cirugías que la convirtieron en protagonista de los tabloides de espectáculos, sin mencionar que su familia siempre ha estado envuelta en polémicas. Ante el mundo, la carrera de Lindsay estaba acabada pero ella sigu8ió trabajando para recuperarse.
La actriz fue reapareciendo en pantalla con proyectos pequeños y mostrando sus avances de salud en sus redes sociales. Ahora ella se muestra más feliz que nunca, lista para estrenar una película navideña con Netflix y con boda en puerta.
Drew Barrymore
Barrymore siempre conquistó a todos con su talento y carisma. Aunque desde siempre se dijo que tendría un futuro prometedor, a sus 11 años comenzó a colarse en las extravagantes fiestas de las celebridades que asistían al famoso Studio 54, un lugar de perdición. Para cuando cumplió los 13 ya estaba tocando fondo o así lo reveló en una ocasión para The Guardian. “Cuando tenía 13 años, ese fue mi momento más bajo. Saber que estaba sola de verdad. Esa sensación era horrible. Fue una época muy rebelde. Yo saldría corriendo. Estaba muy enfadada”, dijo.
Sus padres tampoco fueron las mejores influencias pues mientras que su padre era un alcohólico violento, su madre y mánager nunca tuvo el instinto para protegerla. Esto llevó a Drew a experimentar con drogas y a involucrarse con hombres mayores.
Fue hasta que comenzó a perder contratos y caer en depresión que se dio cuenta que tenía que volver. A finales de los noventa, resurgió como “la reina de las comedias románticas”. Hoy, Drew es una de las consentidas de la pantalla, además de que es empresaria y una madre ejemplar.
Wynona Ryder
La envidiable carrera de Winona Ryder incluye dos nominaciones al Oscar, pero su vida repleta de éxito dio un giro dramático en 2002 cuando la sorprendieron robando ropa por valor de $ 5,000. Además se descubrió que tenía ocho analgésicos diferentes sin receta. En ese momento, la policía dijo que Ryder llevaba oxicodona.
La estrella de Mujercitas fue sentenciada a tres años de libertad condicional, 480 horas de servicio comunitario, recibió una multa de $ 3,700, devolvió $ 6,355 a la tienda departamental donde había robado y tuvo que asistir a terapia psicológica y de drogas.
“Dos meses antes de eso, me rompí el brazo en dos lugares, y el médico ... me estaba dando muchas cosas [oxicodona] y al principio la estaba tomando para superar el dolor. Y luego estaba este punto extraño en el que no sabes si tienes dolor, pero lo estás tomando “, dijo en entrevista con Vogue.
Britney Spears
No es ningún secreto el infierno por el que pasó Britney tras estar 13 años bajo la custodia de su padre. En 2008, la cantante fue captada con la mirada perdida, despojándose de su rubia cabellera y atacando un auto con un paraguas. Ese fue su punto de quiebre pero ella siempre tuvo que lidiar con los paparazzis y las preguntas incómodas y agresivas de los presentadores de televisión que la veían como una muñeca perfecta que sin pensar que se derrumbaba por dentro.
El 2021 fue un parteaguas en su vida ya que finalmente logró liberarse de él y poco a poco ha retomado las riendas de su vida.