Adele no solo ha desparramado su corazón en su regreso a los escenarios con el lanzamiento de 30, su esperado nuevo álbum, tras años de ausencia.
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También ha derrochado su característica elegancia ataviada con majestuosos vestidos negros. Y es que la cantante hizo de este clásico del guardarropa su gran aliado para su retorno a la escena musical.
Las últimas semanas, el público ha visto a la estrella británica rezumando sofisticación en cada actuación con glamurosos diseños en negro en diferentes siluetas y estilos, pero todos muy elegantes.
En su más reciente presentación en vivo de su último y conmovedor sencillo, Easy on me, la artista mantuvo la misma construcción estilística luciendo un epatante vestido en negro couture.
Adele es una visión en un vestido de negro de estilo couture
Destilando garbo y distinción, Adele entonó su emocionante nuevo tema en los NRJ Music Awards, celebrados en Cannes, Francia, el pasado 20 de noviembre.
En su actuación sobre el escenario del Palais des Festivals et des Congrès, la intérprete de 33 años deslumbró ataviada en un complejo vestido negro de ensueño firmado por Dior.
El espectacular diseño de alta costura que le sentó de fantasía, perteneciente a la colección otoño-invierno 2021 de la maison francesa, estaba compuesto por varias capas.
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Cual telón de fondo, la primera se trataba de un top con mangas largas y cuello cisne en tejido abierto, semejante al de red.
Encima de esta, se encontraba un vestido con profundo escote V, tirantes gruesos y una falda midi vaporosa con mucho movimiento, delicadas transparencias y diferentes texturas.
La famosa ajustó el modelo con un delgado cinturón que enfatizó su cintura y realzó su renovada figura; misma que ha logrado esculpir con un arduo trabajo por amor propio.
En cuanto al calzado, la intérprete mantuvo el outfit monocromático apostando por lo que parecían ser un par de botas con tacón alto también en azabache.
La artista, quien ya se había dejado ver con este look durante su participación en LOS40 Music Awards 2021, mantuvo los complementos al mínimo apelando solo a unos lujosos pendientes dorados.
Por último, completó su outfit con un exquisito beauty look. En esta ocasión, la luminaria llevó su cabello recogido en un sofisticado chongo bajo sleek y un maquillaje glamuroso con smokey eyes y labios nude.
Con este impresionante estilismo total black, Adele brilló como de costumbre derrochando su incuestionable estilo y belleza.
Al mismo tiempo, emocionó a los espectadores entonando a todo pulmón el poderoso lead single de 30, el cual evoca su divorcio de su exesposo y padre de su hijo, Simon Konecki.