«La histeria global se produce después de que una misteriosa catástrofe destruye todos los dispositivos electrónicos y le quita la capacidad de dormir a la humanidad. Los científicos trabajan a contrarreloj para encontrar una cura para este inexplicable insomnio antes de que sus efectos fatales eliminen a la raza humana. Cuando Jill descubre que su pequeña hija puede ser la clave de la salvación, debe decidir si proteger a sus hijos a toda costa o sacrificarlo todo para salvar el mundo».
Esa es la premisa de la cinta de Netflix que te erizará la piel al llevar al extremo más terrorífico uno de los males de nuestra época que tanto nos ha afectado.
Y es que en estos tiempos de caos, parece la constante angustia que vivimos día a día nos ha mantenido con una especie de insomnio colectivo.
Dormir es una necesidad intrínseca a nuestra supervivencia así que la cinta nos lleva a preguntarnos: ¿realmente se puede dormir por falta de sueño? ¿Qué pasaría si la humanidad perdiera por completo la capacidad de dormir?
La actuación de Gina Rodríguez, quien protagoniza esta producción, se vuelve cada vez más desquiciada a medida que la película intenta reflejar el estado mental cada vez más delirante de sus personajes.
Resulta que la cura puede estar en una joven de ojos brillantes llamada Matilda (Ariana Greenblatt). De alguna manera, ella es una de las pocas almas que aún pueden dormir.
Jill tendrá que luchar contra asaltantes desesperados como si se hubiesen convertido en zombis privados de sueño, además de que debe lidiar con su propio juicio en deterioro, la decadencia de su hijo y las hordas de personas que quieren que su hija los lleve a recuperar el sueño.
No dormir probablemente no te matará, pero las cosas pueden ponerse feas
Hay una gran frustración de dar vueltas y vueltas y simplemente permanecer despierta mientras tu cerebro vaga inquieto de un pensamiento ansioso a otro. Sufrir una noche de insomnio tras otra puede hacerte sentir muy mal.
El agotamiento y la falta de sueño pueden tener muchas consecuencias, pero es bastante raro morir por ello.
Dicho moverte en tu día a día con poco o nada de sueño puede aumentar el riesgo de sufrir un accidente mientras conduces o hacer algo potencialmente peligroso porque no estás del todo consciente.
Dormir menos de lo que necesitas durante una noche o dos puede provocar un día nublado e improductivo, pero por lo general no te hará mucho daño.
Pero cuando pierdes el sueño con regularidad, comenzarás a ver algunos efectos de salud no deseados con bastante rapidez. Tener noches constantes de sólo una o dos horas menos de lo que necesitas puede provocar que seas más lenta al reaccionar, que tengas cambios bruscos de humor, presentar mayor riesgo de enfermedad física o empeorar síntomas de salud mental.
Permanecer despierta durante 24 horas puede afectarte de la misma manera que una intoxicación.
Investigadores en control de sueño sugieren que permanecer despierto durante 20 a 25 horas afecta su concentración y rendimiento tanto como tener un nivel de alcohol en sangre (BAC) del 0,10 por ciento. En la mayoría de los lugares, se considera que una persona está legalmente borracha cuando tienes un BAC del 0.08 por ciento.
Después de 36 horas sin dormir, comenzarás a notar un impacto mucho mayor en tu salud y la función de tu cuerpo.
La interrupción prolongada de tu ciclo normal de sueño-vigilia pone su cuerpo bajo estrés. En respuesta, aumenta la producción de cortisol (la hormona del estrés). La ingesta de oxígeno de su cuerpo también puede disminuir cuando permanece despierto durante este período de tiempo.
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