Violeta Isfel se ha convertido en una de las favoritas por su gran carisma y estilo de vida que nos inspira a superarnos. En los últimos meses ha estado muy enfocada en hacer crecer su negocio de hamburguesas, el cual inició a raíz de la pandemia en 2020.
La actriz no ha tenido una vida fácil pero la forma en la que ha sobrellevado la adversidad la ha convertido en un ejemplo a seguir para muchas mujeres.
Aunque suele ser muy reservada con respecto a su vida privada, en recientes entrevistas, Isfel ha compartido los momentos que la han hecho fuerte. Desde la relación con el padre de su hijo hasta sus ambiciones como madre y mujer de negocios, la actriz demuestra una cosa: no se deja de nada ni de nadie.
Problemas en el set de «Atrévete a soñar».
Violeta enamoró al público con el personaje de Antonella, antagonista de la telenovela juvenil «Atrévete a soñar». Según reveló en una entrevista con Venga la Alegría, fue un papel que le cambió la vida, pues fue lo que le abrió la puerta a varias oportunidades laborales.
Eso sí, no tuvo fue «miel sobre hojuelas» pues las exigencias de la producción y el trato con otros compañeros hicieron que la actriz tuviera que aprender a ser paciente y a encontrar el balance como mamá.
Por si fuera poco, tuvo que luchar contra quienes no la creían capaz de hacer el trabajo.
La relación con Danna Paola en el set.
Consciente de que Danna Paola estaba en plena adolescencia, la actriz confesó que lidiar con ella fue complicado pues «de pronto estaba muy de buenas y de pronto estaba muy saturada pero no con nosotros».
Las exigencias de la industria le enseñaron a la actriz a romper barreras.
Isfel ha tenido una transformación impresionante a lo largo del tiempo pues se enfrentó a la maternidad sola desde muy temprana edad, además de las inseguridades de estar en una industria tan exigente.
En otra entrevista Violeta reveló que el comparar su cuerpo con otras compañeras y la presión de tener que ser de cierta forma para obtener papeles, la llevó a operarse el busto.
La actriz pronto aprendió que las mujeres debemos de romper el estigma en torno a nuestros cuerpos.
Hoy, Violeta se muestra plena, consiente de quién es y sin importar el qué dirán. Ella muy criticada cuando comenzó con su propio negocio ya que ante muchos, era increíble que dejara el glamour de los foros para estar en una cocina. Pero no dejó que los prejuicios tumbaran sus ilusiones, al contrario, prefirió reírse y seguir.
Su hijo Omar ha sido parte clave en su transformación pues es él quien la ha impulsado a dar lo mejor.
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