Por varios años, el príncipe Carlos fue uno de los solteros más codiciados del Reino Unido y, en medio de su deber real, se mantuvo en la búsqueda de su compañera ideal antes de casarse con la princesa Diana.
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Antes de iniciar su vida con Lady Di y hacer pública su relación con Camilla Parkler, Carlos de Gales mantuvo otros romances, pero uno de los más destacados fue con Sarah Spencer, la hermana mayor de Diana.
Este romance fugaz se hizo público y elevó las expectativas de los súbditos sobre el futuro de la pareja, pero fue la propia Diana quien, muchos años después, reveló detalles.
Sarah Spencer se encargó de presentar a la princesa Diana y el príncipe Carlos
Carlos y Sarah se conocieron en 1977 cuando ella tenía 22 años y el príncipe visitó Althorp, propiedad de la familia de Lady Di.
La joven se mostró muy interesada por el príncipe y comenzó a demostrárselo de inmediato, según relato la propia Diana.
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“Mi hermana Sarah estaba siempre sobre él, y yo pensaba: ‘Dios, cómo debe odiar eso”, aseguró la princesa en el documental Diana: en sus propias palabras.
Al parecer el futuro rey también estuvo atraído por Sarah y empezaron a reunirse frecuentemente, por lo que varias veces fueron fotografiados juntos.
Fue la propia Sarah quien marcó el destino de Diana y Carlos al presentarlos durante una fiesta.
El príncipe quedó encantado con ella. “Se me acercó después de la cena y me dijo: ‘¿Me enseñas la galería?’ Para una joven de 16 años, que alguien así te preste atención, es algo maravilloso. ¿Por qué alguien como él se interesaría en mí?”, reveló Diana en el documental.
Sarah era la mejor opción en aquel entonces, sin embargo, un error la destronó.
La joven habló con periodistas sin saber que sus palabras serían publicadas.
“No hay posibilidad de que me case con el príncipe Carlos. Él es una persona fabulosa pero no estoy enamorada de él”, dijo Sarah. “No me casaría con nadie que no amara, ya fuera un barrendero o el Rey de Inglaterra”, agregó.
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