Aislinn Derbez sorprendió a sus seguidores al compartir unas imágenes nunca antes vistas de su figura tras el embarazo y mostrar lo difícil que fue recuperar su figura esbelta.
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En las imágenes se ve a la actriz con unos kilos de más tras tener a su hija Kailani, algo muy difícil para ella pues confiesa que siempre tuvo un cuerpo delgado debido a la genética que la beneficiaba.
«Para mí los últimos 2 años han sido un viaje de cambios drásticos en ese aspecto. Nunca me había preocupado por tener que hacer dieta o ejercicio, ya que tengo una genética muy privilegiada. Después de parir subí de peso por retención de líquidos y desbalances hormonales. Y tener que lidiar con un cuerpo con el que no me sentía cómoda era algo completamente desconocido para mí», explicó la hija de Eugenio Derbez.
También detalló que fue difícil para ella aceptar su cuerpo como lucía en ese momento, pero finalmente lo hizo al darse cuenta que todo había valido la pena para tener a su hermosa y sana hija.
«En esos momentos no me daba cuenta de lo exigente, impaciente, dura y poco amorosa que estaba siendo con mi cuerpo sin comprender que gracias a ese maravilloso cuerpo tenía a una bebé perfectamente sana en mis brazos. Y me di cuenta de que millones de mujeres pasaban por lo mismo y sentían lo mismo que yo. Gracias a mi terapeuta y a que dejé de preocuparme y juzgarme, mi cuerpo comenzó a bajar de peso».
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La actriz mexicana también confesó que la separación de su esposo Mauricio Ochmann le afectó al punto de hacerla perder peso.
«Luego, contrariamente, hace 6 meses con el duelo de la separación, mi cuerpo lo resintió y comenzó a perder peso rápidamente. Vi que preguntan mucho “cuál es mi dieta o mi rutina”. Nunca he tenido fijación por lograr cierto tipo de cuerpo. Nunca he sido de dietas ni ejercicio. Comencé a hacer ejercicio por recomendación terapéutica ya que segrega oxitocina en el cerebro, tan necesaria para mi proceso (y en general por salud mental y física)».
Y destacó la importancia de escuchar a nuestro cuerpo. «Creo que una vez que comenzamos a escuchar a nuestro cuerpo, aprendemos cómo tratarlo. Tristemente estamos acostumbrados a ver el cuerpo como un objeto y no nos detenemos a comprender su lenguaje, sus ritmos y sus necesidades reales… En este momento, después de haber pasado esos procesos y escuchar-me, es cuando mejor me siento físicamente🥰».