Ryan Reynolds y Blake Lively viven una hermosa historia de amor desde 2012, cuando contrajeron matrimonio. La pareja de actores se complementa profundamente y muestra una gran química en cada una de sus apariciones en las alfombras rojas.
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Pero poco comparte de su vida como familia en redes sociales. Tienen tres hijas, James, Inez y la tercera, a la cual no han presentado al público pero que nació en agosto de 2019 bajo la más estricta privacidad.
A pesar de que ellos mismos no compartan imágenes, los paparazzis siempre se las arreglan para captar a la familia mientras pasea en la calle.
Las adorables hijas de Ryan Reynolds y Blake Lively
James tiene 5 años e Inez tiene tan solo 3. Ambas son adorables y se parecen mucho a su mamá Blake.
Ryan Reynolds, a pesar de su múltiples compromisos en el cine, siempre aparta tiempo para compartir con sus hijas en la cotidianidad.
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Una de las pocas ocasiones en las que la pareja ha llevado a sus hijas a eventos fue cuando Ryan recibió una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood.
De resto, la pareja no está muy abierta ha compartir su vida íntima con sus hijas al público, buscando criarlas como niñas normales y no como hijas de estrellas de Hollywood.
Y ahora, la hija mayor de Ryan y Blake, James, le dio una noticia a sus padres: cuando sea grande, quiere ser actriz.
«Ella quiere ser actriz», confesó Reynolds durante una entrevista en The Tonight Show with Jimmy Fallon.
«Sí. Estoy bien si ella quiere ser actriz. Adelante. Sabes, en la escuela, hacer cosas así después de la escuela. Eso está bien. En este momento, es todos los días como un recital. Está cantando canciones, ella está haciendo pequeñas obras de teatro en casa, todo eso, pero ser un actor infantil en películas y esas cosas, es otra cosa», explicó sobre su negativa a que su hija, siendo una niña, comience a actuar en Hollywood.
Ryan Reynolds y Blake Lively son unos padres ejemplares que buscan cuidar a sus hijas de todos los estímulos a veces dañinos del mundo artístico, que afectan sobre todo a los más pequeños.
