El escándalo ya no es ajeno para la reina Letizia de España. Su comportamiento ha hecho que viva bajo el acoso de la prensa.
Cada paso de la monarca es seguido muy de cerca por los medios de comunicación. Esta vez un pequeño detalle durante una ceremonia en la iglesia la ha puesto de nuevo en el ojo del huracán.
El hecho sucedió durante una ceremonia en la basílica de Covadonga para celebrar el centenario de la coronación canónica de la virgen de esa localidad.
Al acercarse al altar, el rey Felipe y sus hijas, las princesas Leonor y Sofía, se persignaron siguiendo la tradición católica, pero doña Letizia no los siguió y solo hizo una pequeña reverencia.
Este pequeño gesto inició una gran controversia por sus implicaciones religiosas, sobre todo en un país donde la religión católica es parte de su cultura y tradición.
Los medios españoles han reseñado que no es la primera vez que la reina se niega a cumplir con este gesto y lo consideran una ofensa.
La revista Vanity Fair ha publicado que Letizia no cumple con esta norma debido a que antes de su matrimonio se declaraba atea y no disfruta estos eventos.