Desde que se anunció su compromiso con el príncipe Harry, en noviembre del año pasado, Meghan Markle empezó a cautivar con sus atuendos llenos de color y mucha personalidad. Varios vestidos fueron protagonistas de los mejores looks del día de las celebridades, y el mundo entero empezó a apostar al buen gusto de la exactriz al vestir. Pero luego de un mes se haberse convertido en la duquesa de Sussex, Meghan, parece haber reestructurado por completo su armario, dejando únicamente las piezas de colores neutrales como cremas, taupes y rosas pálidos.
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Lucas Armitage, estilista de celebridades y comentarista real, ha dado su punto de vista y segura que es una manera de mostrar su respeto a la reina Elizabeth II, quién es conocida por lucir siempre prendas muy brillantes y coloridas.
«Siento que esta es una táctica de estilismo inteligente, ya que siempre funcionará con la apariencia de la Reina: es conocida y aplaudida por el uso de brillantes colores divertidos».
Desde que Meghan Markle se unió oficialmente a la familia real, se rumora que está buscando la manera de llegar una buena relación con la abuela de su esposo. Una excelente idea es mantener un estilo neutro y comedido en la moda, para no enclipsar a la monarca.
«Creo que la relación de la Reina y Meghan en este punto se basa en el respeto, y Meghan ha cambiado su estilo personal para adoptar una apariencia regia más recatada, algo por lo que creo que la Reina estará agradecida».
Las modas en la realeza tienen su razón de ser, por ejemplo, la reina de Inglaterra utiliza colores brillantes para distinguirse de los plebeyos. La asistente personal de Elizabeth II, Angela Kelley, fue quién originalmente aconsejó a la monarca de vestir los colores brillantes en cada uno de sus eventos públicos.
A pesar de que Meghan ha lucido hermosa y siempre impecable con sus últimos atuendos, esperamos que poco a poco reincorpore los colores a su armario. Después de todo Kate no está obligada a utilizar únicamente colores neutros; sin embargo, respetamos su posición de querer mantenerse cerca pero sin opacar a la mayor autoridad del Reino Unido, que además es la abuela de su esposo.