Un 16 de julio, hace 25 años atrás, se estrenó en los cines de Japón Akira, cinta animé que marcó un antes y un después en la historia de la animación japonesa del siglo XX. Basada en el manga de Katsuhiro Otomo, el filme entró de inmediato al listado de películas de culto de la ciencia ficción. Una propuesta sumamente original y novedosa para su época, que cuenta con todos esas características que vuelven locos a los fanáticos del animé: una sociedad distópica, un estilo visual alucinante, complejos principios metafísicos en su argumento, tecnología futurista, drogas, dictadura, explosiones por doquier, etcétera etcétera etcétera.
Trailer de Akira:
Es innegable que los japoneses saben muy bien cómo sorprender al mundo entero con sus series y películas animadas, las que muchas veces rayan en lo bizarro y lo violento, pero que indudablemente destacan por su genialidad argumental y estética incomparable. Estas cualidades le han dado este tipo de animación un lugar privilegiado y siempre vigente dentro del mundo occidental, manteniéndose con firmeza presente en la cultura pop. La moda, la música, el arte y el cine encuentran en la animación japonesa una fuente de alimentación creativa, que a diario esculpe en nuestras memorias sus llamativas y exuberantes ideas.
¿Qué series y películas de la animación japonesa te han marcado? ¿Cuáles aún te faltan por ver? ¿Cuáles son los must-see del cine animado japonés? En esta ocasión queremos compartir un listado de películas animadas del otro lado del mundo que deberías ver al menos una vez en tu vida antes de morir. Cintas que, ya sea por su grandiosa calidad visual o por sus interesantes historias, han dejado una huella en la historia del cine y de la animación.
1) La Tumba de las Luciérnagas (1988)
Los japo no sólo saben cómo hacernos reír o impactarnos, también conocen al derecho y al revés la fórmula para ahogarnos en el llanto y hacernos sufrir con la cebolla más picada, superando incluso a los venezolanos y sus culebrones. Muestra de ello es este largometraje, que muestra la historia de dos hermanitos separados de sus padres en medio de los bombardeos a Japón en la Segunda Guerra Mundial. Un pariente lejano cuida de ellos en ese período de tristeza, hambre y miseria, que sólo mejora con pequeños detalles de su entorno, como la luz de las luciérnagas. Un dramón antibelicista que te hará llorar sin consuelo.
2) Mi Vecino Totoro (1988)
Las mentes maestras de Studio Ghibli son los responsables de esta maravillosa película, una de las mejores y más hermosas piezas que han salido de la industria del animé. La historia transcurre en los años 50, momento en el que una un padre y sus dos hijas se van a vivir en una casa en el campo mientras la madre se recupera de una tuberculosis en un santuario. Las dos pequeñas entablan amistad con un bonachón ser sobrenatural que resulta ser el espíritu del bosque. Una cinta casi terapéutica, con una evidente visión optimista de la vida y del amor. Simplemente IMPERDIBLE.
3) Ghost in the Shell (1995)
Hay algo encantador y adictivo en la desesperanzadora idea del futuro de la ciencia ficción animada. Esa exquisita y desoladora oscuridad de nuestro destino, la inteligencia artificial y el high tech reinando a la raza humana o quizás la misma poética presente en el cyberpunk, son las características que hacen a este tipo de películas tan atractivas para muchos de nosotros. Ghost in the Shell tiene todo eso: Motoko Kusanagi, una cyborg encargada de las operaciones encubiertas de la Sección Policial de Seguridad Pública en un mundo decadente y en constante amenaza.
4) El Viaje de Chihiro (2001)
La pequeña Chihiro se interna en un fantástico mundo para rescatar a sus padres, quienes fueron transformados en cerdos por no respetar un santuario de dioses y espíritus. En este viaje, ella conocerá a seres increíbles que la ayudarán y guiarán en la búsqueda de una solución que le permita traer de regreso a su familia.
Otro de los grandes aciertos de Studio Ghibli. Una cinta ganadora de 14 premios, incluyendo un Óscar en la Categoría Mejor Película de Animación. Este filme es pura magia y fantasía, y presenta una animación bella, colorida y realista, capaz de encantar a cualquier tipo de público. Una historia aparentemente infantil, pero con un complejo trasfondo filosófico que sirve como materia para diversas interpretaciones.
¡Esperamos tus sugerencias para hacer la segunda parte de este post!