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En Santiago -y tal vez en todo Chile- tenemos tantas versiones de Completos (nuestros criollos Hot-Dogs) como fuentes de soda, cafeterías populares, casinos univesitarios y hasta estaciones de servicio existentes. Sin embargo, no hay Completos con un sabor más caracterísitico que los de la tradicional cadena Dominó, la que a pesar del paso de los años y su evolución al modelo de franquicia no ha dejado de tener una oferta única -y sabrosa- de Completos y otros empredados netamente chilenos.¿Qué tiene de especial un Completo del Dominó? Básicamente su pan esponjoso calentado al vapor, su salchicha de gusto suave, la salsa verde hecha en cada local y su exquisita mayonesa que nos hace recordar cuando éramos pequeños y en nuestras casas se rompían y batían huevos para dar con la consistencia justa de este aderezo. A todo lo anterior se suma una rapidez digna de estudio, que se grafica en que los pedidos llegan donde los comensales a escasos minutos de haber sido solicitados, en perfectas condiciones y casi nunca con algún error.Las variedades de Completos que podemos encontrar en los locales del Dominó son más de una decena. Entre los más destacados están el homónimo Dominó (tomate, salsa americana, mayonesa y salsa verde), la Española (pimentón y mayonesa), la Alemana (tomate,chucrut y mayonesa) y la Antigua (palta, salsa americana y mayonesa). Además, estas distintas preparaciones también pueden ser disfrutadas en sándwiches de churrasco de vacuno, lomito de cerdo, carne mechada, filete e incluso pavo.Para acompañar cualquiera de los productos que ofrece Dominó, vale la pena irse por sus dulces jugos, sus clásicas vitaminas de naranja y zanahoria, o ser tradicional y preferir una bebida o una cerveza bien helada.Con 14 locales en Santiago, que van desde su Casa Matriz en Agustinas hasta variados loacles en distintos malls, Dominó sigue siendo un punto (o bueno, varios) obligado para quienes quieren probar un completo de estilo único e inigualable.
