Mily Salazar nunca imaginó que su vida la llevaría a ser parte de una unidad élite dentro de la Policía Nacional del Ecuador. Sin planificarlo, se unió a la Escuela Superior de Policía como cadete y, tras tres años de dedicación, empezó como oficial lista para enfrentar nuevos desafíos.
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Desde entonces, ha forjado un camino notable en el cuerpo policial, destacando su rol como piloto en el Aeropolicial, una unidad reconocida por las operaciones complejas que realizan. “Es un deseo y aspiración para muchos ingresar a esta unidad”, comenta con orgullo, ya que está a punto de cumplir siete años en este equipo.
A pesar de ser una de solo cinco mujeres entre 42 pilotos, Mily enfatiza que el trabajo y las responsabilidades son iguales para todos. “No he enfrentado problemas en un entorno predominantemente masculino”, dice con confianza.
Su papel ha cobrado especial relevancia en los recientes incendios en Quito, donde ha liderado misiones de reconocimiento y extinción. “Cada vuelo es un desafío”, señala, explicando que durante las condiciones climáticas requieren una gran concentración y preparación. Antes de cada misión, su equipo realiza revisiones técnicas exhaustivas de las aeronaves, asegurando que estén listas para cualquier emergencia.
“Siempre tomo de ejemplo el trabajo que ha realizado mi mamá en nuestras vidas”
La inspiración de Mily proviene de su madre, a quien considera su heroína. “Ella me enseñó que con esfuerzo, dedicación y disciplina, se puede lograr cualquier cosa”, reflexiona. Esta filosofía de vida la ha guiado en su carrera y más allá.
Además de su trabajo, Mily comparte su amor por el ciclismo y el fútbol, un deporte que le permitió representar a su país en su infancia. Aunque ahora practica estos deportes como pasatiempos, su pasión por el ejercicio es innegable.
Mily tiene un mensaje poderoso para todas las mujeres: “Si te gusta algo, hazlo con el corazón, con fe y sin preocuparte por lo que dirán”. Para ella, no importa el género; lo que cuenta es la dedicación y el deseo de hacer lo que se ama. Con su historia, Mily Salazar es un ejemplo en la policía y una inspiración para muchas que buscan romper barreras y seguir sus sueños.