Bajo el liderazgo de Lavinia Valbonesi, primera servidora del país, se llevó a cabo el lanzamiento oficial del programa ANA. Este evento, realizado en el restaurante Marenostrum en el Potrero de Lumbisí - Cumbayá, contó con la presencia de medios de comunicación y diversas personalidades de la sociedad civil.
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Transformando vidas
El programa ANA, un proyecto multisectorial promovido por la sociedad civil, tiene como objetivo mejorar las condiciones de vida de miles de mujeres y niños ecuatorianos que han sido víctimas de violencia. Valbonesi destacó en su discurso que el nombre del programa representa a todas las mujeres que han sufrido en silencio, viviendo con miedo y desesperación debido a diversos tipos de abuso.
Herramientas y recursos para un nuevo comienzo
ANA se propone brindar herramientas de prevención, recursos de formación y oportunidades de desarrollo a las mujeres víctimas de violencia. Estas herramientas les permitirán adquirir conocimientos y habilidades para construir una nueva vida. Además, el programa ofrecerá servicios de apoyo psicológico y módulos educativos para mujeres en situaciones difíciles.
Educación en valores y becas para el desarrollo
En colaboración con la organización Lyon Quest y el Ministerio de Educación, ANA implementará un plan de formación en valores para niñas y niños en las escuelas del país. Además, se otorgarán becas en escuelas e instituciones relacionadas con el deporte y el arte, como parte de una estrategia para promover el entendimiento de sus derechos y el reconocimiento de las diversas formas de violencia.
Primera fase: Impacto en cinco ciudades
En su primera fase, ANA atenderá cinco ciudades de las provincias de Pichincha, Azuay, Guayas, Orellana y Manabí. Las primeras acciones ya han comenzado en la zona rural de San Fernando, en Azuay, y en Quito, en el Centro de Desarrollo Integral de la Mujer.
Un llamado a la unidad
Lavinia Valbonesi enfatizó la necesidad de unir esfuerzos entre todos los sectores de la sociedad para garantizar el éxito del programa. “Transformar positivamente la vida de miles de mujeres y niños debe ser un objetivo que involucre el esfuerzo de la empresa privada, la academia y la ciudadanía en general. Debemos aportar nuestros recursos y capacidades para enfrentar una problemática que requiere de la movilización de todos”, afirmó.
Esperanza y futuro
Al cierre del evento, Valbonesi invitó a todos a trabajar en esta causa común, con la esperanza de que en un futuro cercano las mujeres del Ecuador puedan vivir libres de violencia. “Soñamos con que llegue el día en que 7 de cada 10 mujeres en nuestro país dejen de vivir en condiciones de vulnerabilidad y, en cambio, ocupen posiciones de liderazgo”, agregó.
Este lanzamiento marca un hito en la lucha por un futuro libre de violencia para mujeres y niños en Ecuador, abriendo un camino hacia la esperanza y el empoderamiento.
