Ruth E. Carter, ganadora del Oscar a Mejor Vestuario por “Black Panther”, recrea otro maravilloso reino de ficción africano con exuberancia y sello propio.
Luz Lancheros, MWN
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“Si Wakanda es el corazón tecnológico de África, Zamunda es el centro del arte y de la moda”, afirmó Ruth E. Carter para WWD. Un príncipe en Nueva York 2 : la majestuosidad de la moda africana
Esto lo dijo la legendaria diseñadora de vestuario, refiriéndose a la nación que ahora regenta Akeem (Eddie Murphy), el protagonista de la ya icónica película de los 80 “Un príncipe en Nueva York” (1988).
Y si aquella, ya hace más de treinta años, nos mostraba maravillas en vestuario –cómo olvidar la maravillosa capa de león de su padre, el imponentísimo rey Jaffee Joffer interpretado por James Earl Jones– en la segunda parte, ya en Zamunda, esto se supera por lejos.
Un príncipe en Nueva York 2 : la majestuosidad de la moda africana
Ruth combinó culturas africanas, estéticas e influencias del pop para mostrar a cada personaje de la familia real. Esto también con los recién llegados Lavelle Junson y su madre Mary (el hijo de Akeem, interpretado por Jermaine Fowler, y su madre es interpretada por la siempre genial Leslie Jones).
Así, se establecieron como personajes independientes y con su propia personalidad en un reino donde todo es complejamente elaborado.
De hecho, la vestuarista hizo una extensa investigación sobre la moda africana y su cultura. Se valió del trabajo de 39 diseñadores africanos independientes para crear fabulosos atuendos.
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Un príncipe en Nueva York 2 : la majestuosidad de la moda africana
Así se inspiró en cada personaje para lograrlo.
Akeem y Lisa, pareja real
Akeem ya no es el cuasi-ingenuo príncipe de la primera parte, es un heredero hecho y derecho que de pronto se encuentra con el peso de la corona.
Al lado tiene a Lisa (Shari Headley), que ya no es la hija del dueño de McDowell’s ni una joven neoyorquina de los años 80, sino una reina con aires a Letizia de España y Rania de Jordania.
Ruth quería que la Familia Real tuviera su propio sello distintivo y que ningún atuendo se pareciera al de las marcas conocidas.
Por eso, a Akeem le dio colores como el rojo y estampados que definieran a la dinastía. A Lisa le dio varios tonos azules en complemento.
A los atuendos de ambos conchas cauri, que son comunes en África Occidental y que son símbolo de poder, ya que se usaban como comercio y arte.
Asimismo, creó un patrón de silueta para Akeem.
Lisa también usa muchos vestidos de diseño indio. Comparte con sus hijas las fabulosas coronas que comparte con sus hijas, creadas por Laurel DeWitt.
Él ha sido diseñador de atuendos para el cabello de Lady Gaga y Beyoncé.
Las herederas reales
La nueva trama se centra en el hecho de que Zamunda no tiene herederos varones y buscan uno para que el dictador Izzi (Wesley Snipes) no termine asesinando al nuevo rey.
Lisa y Akeem tienen tres fieras y muy inteligentes hijas: Meeka, la presunta heredera (Kiki Layne), Omma (Bella Murphy) y Tinashe (Akiley Love).
La vestuarista las diferenció a través de cortes y siluetas. A Meeka le da un aire real natural y acentúa su naturaleza de heredera con su fabuloso traje de entrenamiento PUMA.
Este tiene la bandera zamundana, que recuerda un poco también a la danza contemporánea.
Ella también usa un halter de la misma marca con brazaletes que dicen “Democracia”, creados por la marca Jahnkoy.
Meeka también es quien usa las siluetas más arriesgadas.
Por otro lado, Omma usa prints y piezas mucho más statement, sobre todo en los hombros.
De hecho, su personaje usa una pieza de la diseñadora Palesa Mokubung y le permite luchar tan bien como sus hermanas. Y, en cuanto a Tinashe, usa también volúmenes y estampados vibrantes.
La idea era vestirla como una muñeca. Las joyas también fueron creadas por varios diseñadores, como Melody Ehsani.
Un príncipe en Nueva York 2 : la majestuosidad de la moda africana
Los recién llegados
Lavelle es el hijo impensado de Akeem y producto de un muy controversial one night stand con Mary Junson (Leslie Jones).
A la hora de recrear sus fabulosos atuendos (muchos de los de Lavelle nos recuerdan a T’Challa) también se pensó en hacer homenaje a la vestuarista anterior, Deborah Nadoolman, quien dejó los atuendos de Akeem y el de la boda de Lisa como ya clásicos de la historia del cine.
Esto se hizo a través de los grandes volúmenes y turbantes que hay en sus vestidos.
El palacio real
El palacio real de Zamunda desborda suntuosidad. Esto también se ve en trajes para los que la vestuarista tomó elementos de la India, en colores joya, como el de la Sacerdotisa de las Rosas (Garcelle Beauvais).
También dio rienda suelta al color con los bailarines, el coro y artistas invitados, como Salt-N-Pepa, combinando su estilo con el de las artistas.
Un toque de nostalgia
Otros homenajes a la película anterior y que fueron claves como momento cómico, fueron retomados para dar un toque conmovedor.
Esto se puede ver, por ejemplo, en el atuendo lleno de souvenirs neoyorquinos que Akeem usa en la primera película y que acá se repiten tal cual.