Los azulejos, en especial los blancos, se estropean con mucha facilidad de grasa y suciedad.
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Los azulejos o baldosas, como también se le conoce a este material, para la cocina en temas de decoración son una excelente manera de darle un toque muy personal, sofisticado y elegante a dicho espacio para preparar las comidas.
Lo recomendable es seleccionar los azulejos fabricados con materiales resistentes, súper fáciles de limpiar y sumamente accesibles al bolsillo de la persona que desee decorar el lugar.
Decorar con azulejos para la cocina es todo un arte y en el que se debe consultar a los expertos en la materia.
Es por eso que a la hora de escoger los azulejos en la cocina consideres cuál es la combinación perfecta que haga contraste con los gabinetes, estantes, mesa y hasta con los aparatos electrodomésticos como la cocina o el refrigerador.
Este 2021, están de moda los azulejos en tonos claros por dar a los espacios un simple, elegante y tradicional.
Trucos para limpiarlos
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¿Quieres que los azulejos en tu cocina siempre estén perfectos e impecables?
Entonces tendrás que prestar atención a la siguiente información.
Por lo general, los azulejos, en especial los blancos, se estropean con mucha facilidad de grasa y suciedad.
Te presentamos algunos trucos y tácticas para limpiarlos con facilidad y que la tarea no sea una tortura:
Agua y jabón
La mezcla más básica de todas pasa por tomar un envase, llenarlo de agua caliente y añadir jabón líquido.
Empapa el líquido en una esponja y usa la cara áspera para frotar la suciedad de los azulejos. En caso de que no haya mucho acumulado, puedes usar la cara suave.
Una vez hayas frotado toda la superficie, retira los restos de jabón con agua y seca después usando un paño limpio o bien papel de cocina.
Un poco de vinagre
El vinagre blanco o de vino es un excelente producto limpiador cuando hablamos de retirar grasa y limpiar los azulejos.
En un envase añade agua caliente y una parte de vinagre blanco por cada tres de agua. Mezcla bien y usa una esponja humedecida con ello para frotar toda la superficie a limpiar.
Con amoníaco
Si en tus azulejos se ha acumulado mucha grasa y desean que recuperen su color original de antaño, puedes preparar un envase de agua caliente con amoníaco.
Para usar esta mezcla es muy importante que lo hagas con guantes de goma y con las ventanas abiertas para que los vapores del amoniaco no te mareen.
El poder del bicarbonato
Otra de las fórmulas para devolverles el brillo y pulcritud a los azulejos es el agua con bicarbonato.
En este caso debes diluir el bicarbonato y humedecer en esa agua una esponja para luego frotar los azulejos.
También puedes añadir al agua con bicarbonato unas gotas de jabón y agua oxigenada. La combinación hará que la suciedad salga inmediatamente.
Tratamiento más ecológico
Si prefieres utilizar otro tipo de ingredientes menos comerciales, puedes limpiar las juntas de los azulejos con limpiadores naturales.
Hay varios trucos que funcionan y uno de los más efectivos es el zumo de limón con un poco de agua.
También hay otros productos que, si bien no dejan de ser químicos, son de uso habitual en casa como el amoniaco o la lejía.
Recuerda que nunca debes mezclar estos dos componentes, si no quieres sufrir una intoxicación muy peligrosa. La mezcla de lejía y amoniaco produce vapores tóxicos extremadamente perjudiciales para las vías respiratorias.
Para eliminar el moho
Las manchas negras de moho pueden arruinar los azulejos, especialmente en espacios húmedos como en la cocina.
Son restos difíciles de eliminar, para los que se necesitan soluciones especiales.
Puedes utilizar productos antimoho, que resultan efectivos contra este tipo de suciedad. Se aplican pulverizando sobre las juntas, siguiendo las instrucciones del fabricante.
El vinagre blanco y el agua oxigenada también funcionan para eliminar las manchas de moho.
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