“Aceptar el ciclo natural de la vida y descubrir toda su belleza”, así es el estilo wabi sabi.
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La decoración wabi sabi se basa en la idea de encontrar la belleza en la imperfección. Las grietas en las paredes de yeso desgastadas, las hendiduras en los objetos y las otras marcas que el tiempo, el clima y el uso dejan no se ocultan.
En este estilo que viene de Japón priman los colores apagados, los textiles deshilachados y las asperezas de los materiales prácticamente sin tratar, casi sacados de la naturaleza. Representa el arte de la imperfección y la simplicidad, mezclado con un toque de modernidad.
Para los expertos en la decoración, el estilo wabi sabi se resume en esta simple frase: “Aceptar el ciclo natural de la vida y descubrir toda su belleza”.
La imperfección
Te presentamos algunas características de la decoración japonesa wabi sabi y si deseas unirte a este arte para decorar el interior de tu hogar:
– La decoración con estilo wabi sabi incluye en sus espacios arte contemporáneo y piezas antiguas creando ambientes con una paleta de colores reducida y apagada que invita a la relajación.
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– De origen oriental, wabi-sabi es una estética profunda que venera la autenticidad.
– Su encanto radica en apostar por pocas piezas pero muy bien escogidas bajo las consignas de la imperfección, humildad y contemplación de la naturaleza.
– Se basa en la belleza de lo imperfecto, casas en las que se siente el paso del tiempo, estancias que reivindican materiales naturales y ambientes que se colorean en tonos neutros.
– La decoración al estilo wabi sabi usa materiales prácticamente sin tratar, casi adquiridos de la naturaleza. Madera, piedras, fibras naturales… y en textiles, más de lo mismo: algodón, lino, lana.
– Este estilo apuesta por tonos neutros. Comienzan en la paleta de los grises y llegan al blanco a través de la línea de ocres poco saturados. La gama cromática de este estilo pretende conseguir cierta atemporalidad para transmitir una sensación de calma y sosiego.
Decorar al estilo wabi sabi
El Wabi-Sabi, a grandes rasgos, hace referencia a una corriente estética japonesa cuya finalidad es apreciar ambientes y objetos sencillos o inacabados, donde la huella del tiempo se refleje de manera abierta.
Te presentamos algunas propuestas de la decoración con estilo wabi sabi:
Las casas wabi-sabi se visten con muebles rústicos y sencillos, con textiles naturales como algodones, lanas o linos, que son tejidos suaves.
Para la elección cromática se buscan colores no estridentes que surgen de la naturaleza y sugieren el paso del tiempo, uso y desgaste, como marrones, beiges, blancos o grises.
Para la decoración, el estilo wabi sabi usa piezas de simpleza rústica, minimalismo cálido, naturaleza en estado puro.
Los colores terrosos son, quizá, los más acordes con la filosofía Wabi-Sabi. No dejes de añadirlos en detalles como el color de las paredes o en pequeños cestos y objetos. Eso sí, nada de sobrecargar los espacios.
Detalles como una madera antigua, de madera decapada pueden crear rincones con mucho encanto dentro de cualquier estancia con estilo wabi sabi. La decoración no debe ser tan moderna y sofisticada, la clave está en la imperfección.
Los suelos más comunes en este tipo de decoración apuestan por hormigones y maderas sin tratar. Los hormigones no se pulen y las maderas presentan un aspecto envejecido que transmite el encanto rústico de todo aquello que es natural.
El estilo wabi sabi tampoco es ajeno al metal. En cualquier caso, este estilo se nutre de materiales tradicionales, cuyo uso es común desde la antigüedad. Y se prefieren aquellos que han sido poco tratados.
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