La influencer y empresaria Manuela Gómez compartió con sus seguidores a través de sus redes sociales una actualización sobre su estado de salud, tras regresar de un viaje a Cali. Aunque logró resolver algunos asuntos pendientes, confesó que continúa enfrentando fuertes malestares y los efectos secundarios de los medicamentos que está tomando para aliviar su dolor.
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“El dolor es constante”, expresó Manuela, quien adelantó que está considerando internarse en una clínica especializada en el manejo del dolor. “En la resonancia no salió nada, pero estoy en un tratamiento con medicamentos muy fuertes que me mantienen somnolienta. Mi mente no es la misma, siento que no coordino bien y olvido muchas cosas. Este ha sido el proceso más difícil de mi vida”.
Uno de los aspectos más complicados para la influencer ha sido su limitada interacción con su hija, Samantha, debido a los malestares físicos. Manuela explicó que le resulta difícil cargarla y atenderla como desearía, aclarando que esta situación no se debe a falta de amor o interés. “No soy una mala madre. El hecho de que no demuestre todo el tiempo en redes lo que siento por ella no significa que no esté pendiente. Amo profundamente a mi hija, pero por mi salud, este proceso ha sido muy duro”, afirmó entre lágrimas.
A pesar de las dificultades, Manuela expresó su determinación de encontrar nuevas alternativas para mejorar su situación. “Alguien tiene que ayudarme con este dolor. Llevo un mes así y no quiero pasar diciembre alejada de mi hija. Lo único que deseo es compartir este tiempo con Samantha”, concluyó.
Sus seguidores han mostrado su apoyo y solidaridad, enviándole mensajes de ánimo y sugerencias para superar este complicado momento. Manuela sigue luchando por recuperar su bienestar mientras enfrenta los retos de la maternidad y la salud en medio de una situación que ella misma ha descrito como “la más difícil” que ha vivido.