Se pensaría que la versión colombiana de ‘La casa de los famosos’ tendría paralizado al país y a la región entera, como pasó en la versión mexicana al ganar Wendy Guevara. Pero sus pobres cifras en rating y los comentarios demuestran que en este formato a RCN todo le salió mal.
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De hecho, el 20 de febrero el programa tuvo el peor rating de su historia. Estuvieron en séptimo lugar y a este paso, jamás llegarán a superar a Rigo, que es lo mejor que RCN ha tenido en años si hablamos de ficción, o a ‘La voz kids’, que ha dejado atrás la pornomiseria y se ha concentrado en la elección de talentos singulares, y qué talentos, cosa que atrae bastante al público.
Y es porque se confiaron creyendo que solamente sus famosos sostendrían al programa por sí solo, como pasó con Wendy Guevara, Poncho De Nigris y Sergio Mayer en la exitosa versión mexicana. Pero el problema es que no hay gente lo suficientemente famosa fuera de las redes sociales para cautivar a un público que aún consume televisión abierta mayoritariamente.
Sí, Karen Sevillano es querida en redes sociales, La Segura también, o Johana Velandia puede que sea una gran comediante. Ellas, más Mafe Walker han sido una revelación para los colombianos, pero no alcanza eso para tener a verdaderos famosos dentro de la competencia que remuevan masivamente opiniones más allá de la web.
Igualmente, Martha Isabel Bolaños e Isabella Santiago no pueden cargar solas todo el peso del show y los hombres no son lo suficientemente fuertes o relevantes para destacar en algo o generar algo de simpatía.
Ahora bien, lo peor: la producción del show. ¿Pero en qué estaban pensando? ¿Que esto era 2002, cuando apenas comenzábamos con los realities en la televisión colombiana?
¿Es esto los años dosmiles y estamos condenados a ver esta improvisación?
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El reality fue concebido para ser visto en streaming, definitivamente. Pero la gritería, el exceso de ‘parla’ de las presentadoras (lo que importa son los famosos) y la improvisación han hartado a los televidentes.
Que por otro lado, ya hasta el hartazgo de realities de convivencia (de eso tuvimos dos décadas), exige mejor calidad, como pasó en México y actualmente en Telemundo.
‘La casa de los famosos’ nos devuelve inmediatamente al comienzo de los dosmiles
Todo se ve pobreteado, como de calidad tipo Aliexpress, incluso más bajo. En transmisión es como si no se decidieran por lo que van a mostrar, realmente. Es por eso que el primer episodio parecía una obra de colegio, y la sensación de que lo es, a pesar de que hay más orden, no se ha ido en los episodios siguientes.
Eso se ve en las presentadoras. Carla Giraldo será una gran actriz, pero no es presentadora. Eso se ve en cada aspecto, que palidece frente a sus versiones hermanas.
Todo eso hace que ‘La casa de los famosos’ sea un mal programa, hasta ahora, siendo salvado por algunos personajes que se roban el show. Pero, ¿que vaya a tener el impacto del programa de Wendy Guevara?
No con esa producción, ni como está planteado ni en un país que definitivamente prefiere los realities donde la gente muestre algún talento.
