Mucho se ha dicho sobre la buena posición social que posee la familia de Clara Chía, pero sus modales expresan todo lo contrario.
Y es que recientemente se filtró una imagen en la que la joven de 24 años aparece en un lujoso yate acompañada de Piqué y su suegra Montserrat Bernabeu y más allá de “deslumbrar” con su diminuto bikini, ella “horrorizó” a quienes la vieron tomar una cuchara para comer el plato que le habían puesto sobre la mesa en su paseo romántico por Grecia y además cómo posó sus codos en este sagrado lugar.
La manera en cómo tomó el cubierto dejó en evidencia de que esta chica no ha recibido clases de comportamiento social y sobre todo que pareciera no pertenecer a las altas esferas de las que dicen que salió, pues se comportó de forma grotesca, casi coloquial.
Clara Chía no sabe de modales y por eso la sentencian en las redes
“Cuando no sé siquiera comer, pero hago creer a todos que soy de clase alta”, “Que le den unas clases de etiqueta, esta tipa nunca va a dejar de ser una naca”, “Yo no soy de clase alta, pero sé que no se ponen los codos sobre la mesa”, “A esa marginal, le pagan cirugías pero no clases de etiqueta”.
Esas fueron algunas de las miles de reacciones que generó la postura y comportamiento de Clara Chía sobre la mesa en la que tomó la cuchara de una manera antiestética y hasta poco femenina, pero esto lo remató al posar sus codos sobre el lugar en el que reposaban los alimentos.
Con ello queda claro que no hay nada de conocimiento sobre la ética o modales sobre la mesa, muchos menos hay el interés por mostrarse elegante, pues si en algo se ha caracterizado esta estudiante de relaciones públicas es en ser un poco “brusca” en sus gestos, así como poco interesada en lucir bien ante los paparazzis que ella sabe que la persiguen a cada sitio que va.