La Selección Colombia femenina logró lo que ni siquiera sus pares de la categoría de mayores han logrado en toda su historia. Le ganaron 2-1 a Alemania en el Mundial Femenino, mostrándose así como la primera selección sudamericana que derrota a la germana en fase de grupos.
Linda Caicedo comenzó con los goles, pero Alemania empató con un penal. Pero ya a punto de acabarse el partido, Manuela Vanegas marcó y enloqueció a la tribuna en Sidney. Todo, con un tiro de esquina.
Pero a pesar de que son orgullo del país y que claramente han logrado más de lo que han logrado los hombres en varias categorías, su sueldo es vergonzante y no hace justicia a lo que están consiguiendo en materia deportiva para el país. Estos son algunos datos sobre la terrible disparidad entre el fútbol femenino y masculino en Colombia.
La Selección Colombia Femenina de Fútbol gana muchísimo menos que la Selección Colombia de Mayores en categoría masculina
Hay que comenzar diciendo que a toda jugadora que ha mostrado esta injusticia la han silenciado totalmente. Igualmente, no hubo liga el año pasado en el segundo semestre por la Dimayor.
Y en Estados Unidos hasta ahora se está logrando paridad salarial, pero en un país que ha insultado continuamente a sus jugadoras a través de sus machistas y corruptas asociaciones futbolísticas, es un imposible.
En la liga nacional, por ejemplo, los sueldos para los hombres (los de la liga Betplay) son de 4 millones a 200 millones de pesos. Para las jugadoras solo hay sueldos hasta de 2 millones de pesos.
Y si bien la CONMEBOL anunció premios de 1′5000 mil dólares para las campeonas de la Copa América Femenina, la brecha sigue siendo enorme: el año antepasado los argentinos recibieron 10 millones de dólares por ser campeones, dando una disparidad de 8, 5 millones de dólares. Asimismo, y aunque esto ha cambiado, la cobertura de la liga femenina es paupérrima, según la Unesco: no llega ni al 10%.
Sí, Linda Caicedo, Manuela Vanegas y la Selección Colombia Femenina son el orgullo de un país. Pero que comiencen a pagarles acorde y como se lo merecen.