Karol G lució un polémico vestido, muy en la onda Y2K con el que los colombianos mostraron todo su clasismo.
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De hecho, es un atuendo que muestra la forma de sus pezones y que parece que fuese confeccionado tal y como si fuese un traje de buceo. Esto, acompañado de unas sandalias muy dosmileras también y unas gafas acorde.
La reguetonera se presentó así al front row de Loewe, desde donde la invitaron, y lució su atuendo con toda la actitud.
Pero para el colombiano promedio, eso es sinónimo de “mal gusto”. Es más, una vez el misógino y desactualizado periodista de ‘La red’, Juan Carlos Giraldo, la llamó “puerca” por usar un conjunto en dénim y de rotos.
Esto pasó esta vez, con el look de marras.
“Yo la amo, pero...”
Dicen que la reguetonera no tiene buen gusto y que hasta ahora están descubriendo que es “bien guisa”, esto, a pesar de que el 80% de la moda actual, casas de lujo incluidas, manejan esta estética. Incluso le criticaron que no se hiciera el “pedicure” porque “no combinaba un bocadillo esa muchacha”.
También se metieron con el ajuste del vestido, e inclusive criticaron que la marca “no le hubiese prestado absolutamente nada mejor”. Claro, el fashion police colombiano cree que todas las famosas deben vestirse igualito y por supuesto que van a censurar a una mujer en una corriente que prácticamente es vanguardia a nivel mundial.
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El gusto señorial, claro, es lo que menos le importa a Karol G: fue portada de Vogue y se puede poner lo que ella quiera, prácticamente. No todas las famosas del país tienen que vestirse como una Carolina Herrera wannabe, y ese estilo está bien delimitado para ciertos contextos.
Ni por qué decir que es bastante limitado. Es hora de abrir la mente y bien por Karol G, que al menos sí está en primera fila en un desfile de París.
