Bad Bunny reventó los estadios de las ciudades de Medellín y Bogotá, por su paso en el país con su gira ‘World’s Hottest Tour’, donde no solo obtuvo aforo completo y un show que quedará en la memoria de sus asistentes, también presentó un caos sin precedentes y es una problemática que no solo ocurrió con su concierto.
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Los artistas que han pisado Colombia recientemente y que han estado programados para dar espectáculos masivos en la capital, como lo fueron Dua Lipa y Harry Styles, y ahora se le suma Bad Bunny, quienes son conocidos a escala global y se sabe que la calidad de sus shows es impecable, no han podido ofrecer esta experiencia para sus fanáticos y asistentes en general, ya que han surgido toda clase de problemas que van desde sobreventa de boletos hasta una pésima logística en su recinto y un par de víctimas fatales por el camino.
Si los colombianos creían que el concierto de Bad Bunny estaría exento de drama, terminó sucediendo todo lo contrario. La calidad del show que ofreció Benito Antonio Martinez, nombre real de Bad Bunny, no se pone en tela de juicio, pues a pesar de todas las fallas que ocurrieron alrededor de este, quienes pudieron estar en su presencia lo catalogan como el mejor espectáculo del año, donde la diversión, el perreo y la fiesta no faltaron ni un minuto.
Pero no todo ha sido reggaetón y rumba para quienes llegaron a los estadios de las respectivas ciudades, pues el caos que se vivió al ingreso gracias a la mala logística que se dio con la gestión de las boletas impidió que muchos pudieran hacerlas valer, y en redes sociales han acusado a la empresa encargada de la venta de tiquetes ‘TuBoleta’ de sobrevender el evento y enviar boletas duplicadas, donde claramente quien llegara primero entraba, pero quienes tuvieran dicha dúplica perdían el acceso, por más recibos y pruebas que tuvieran de que la transacción había sido hecha de manera legal.
“La organización del concierto de Bad Bunny fue fatal, como así que 70 personas teniendo la misma silla?? Como así que comprando directamente en tuboleta y no los dejaron entrar al evento?? Donde estará el organizador Diomar Garcia?”, comentó una cibernauta sobre la problemática vivida en el concierto de Bogotá.
Así mismo, otra persona afirmó qué: “La logística de Bad Bunny en Bogotá fue un desastre. Más de 5 horas para entrar al Campín; cientos de personas colándose y traspasando las barreras de seguridad; 11 p. m. y el escenario no estaba listo y por eso se atrasó todo. Medellín demostró ser la ciudad superior de nuevo.”
Acá, más experiencias de quienes tuvieron que padecer el caos de no poder ingresar al Estadio El Campín, y ‘TuBoleta’ no solucionaba nada:
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A esto se le suma el vergonzoso desastre que se vivió a la entrada, retrasándose por más de una hora el inicio del concierto ya que la cantidad de personas que aún se encontraba en fila era monumental, y muchos derribaron vallas y divisiones para intentar entrar en estampida, pues el show si sí o sí debía dar inicio pronto.
En Medellín, si bien el caos fue un tanto menor, no faltaron las personas que se quedaron por fuera, nuevamente, por la sobreventa en ambas fechas que se programaron para el estadio Atanasio Girardot. A eso se le suma el fatal y descuidado evento donde uno de los vendedores ambulantes autorizados sacó un puñal en medio de los asistentes debido a un malentendido en el sector donde se encontraba, que afortunadamente logró ser controlado pero que igual levantó dudas sobre la poca seguridad que había en el evento.
Bad Bunny y su gira no han sido los únicos maltratados por los promotores de organización y logística en el país
Otros artistas que han estado en el país, o que lo estarán en tan solo unos días, han tenido que modificar sus shows gracias a la mala gestión de sus promotores, como fue el caso de Dua Lipa, que aparte de tener que recortar su escenografía para que su tarima encajara, tuvo la peor logística que se le había dado a un concierto hasta ese entonces, donde se vieron desmayos en las filas, un pésimo trato de la logística hacia los fanáticos, nuevamente estuvo presente la sobreventa del evento y la obligación de tener que ver un concierto literalmente en un parqueadero.
La empresa responsable, Ocesa, se lavó las manos y jamás escuchó a los asistentes que a gritos pedían que la locación se moviera, y no fue sino hasta que la situación escaló a grandes superficies, que decidieron cambiar el lugar del recinto de Harry Styles, quien fue movido del Movistar Arena al parqueadero del Salitre Mágico, y eso ya era un desastre vaticinado. Tras negociaciones con el equipo del cantante británico, lograron reacomodar el show en el Coliseo Live. Igual, que vergüenza con el artista en ponerlo en esa situación cuando ya había un contrato pactado.
Pero eso no quita el sinsabor que todas estas experiencias ha dejado, y muchos temen que a Colombia se le apague el auge de ser un referente para conciertos, todo por las pésimas adecuaciones, así como las logísticas de acompañamiento y seguridad, y los malos tratos que sus fanáticos reciben constantemente por parte de estas compañías.