Para el que se hartó de ver siempre los mismos videos de “fantasmas” (que a veces resultan ser montajes muy elaborados) hay una opción si se trata de historias paranormales en Colombia: la más popular actualmente es la que ofrece Howard Gutiérrez, estudiante de periodismo y creador de Conexión Enigma, canal con más de 75 mil suscriptores, que reúne historias contemporáneas contadas por los lectores y leyendas urbanas en lugares como Transmilenio, los Museos de Bogotá, carreteras y hasta leyendas como la de La Patasola, entre otras.
De esta manera, Gutiérrez, quien hace un contenido original, ha logrado una fanaticada que ve en sus historias una manera de contar este país a través del terror en un formato innovador. PUBLIMETRO habló con él sobre cómo logra recopilarlas.
¿Por qué comenzaste con este canal?
Desde muy joven me inquietan las dudas existenciales. Siempre busqué las respuestas en mil misterios del mundo, pero me di cuenta que no existe una respuesta para esto. Luego, con el tiempo, intentando encajar en los grupos grandes de lo paranormal en Colombia (algo imposible por mil razones) decidí contar las historias o hablar de misterio a mi manera.
Ya que nadie quería escucharme y también tratando de llevar la contraría a esos grupos, emisoras, que se guardaban las historias para ellos. Yo nunca he tenido nada que perder, todo lo contrario. Entonces fuí contando historias sin tratar de vender verdades, pues nunca las he encontrado.
-¿Qué es lo que más te atrae de lo paranormal?
Lo que me llama de lo paranormal es su significado " que no se puede explicar mediante la ciencia ni cumple con nuestras leyes”, que no es algo normal. Y cuando mezclas esto con la filosofía, la religión, el día a día, encuentras que muchas cosas que hacemos o creemos los seres humanos son paranormales.
Por lo tanto, en todo lugar existen historias que contar.
-¿Cómo es el método para encontrar las historias?
Tengo varios métodos. Uno, que siempre fue el principal, es el de ir a la calle y hacer campaña. Hablar con la gente. Decirles que tengo un proyecto y esperar a que sientan confianza como para que te cuenten algo de sus vidas, obvio paranormal.
Muchas veces lo he hecho en buses entregando tarjetas con mi WhatsApp y mis redes sociales, y otras en pueblos, barrios o tiendas. Después, las personas que van conociendo mi canal me envían al correo o a Instagram sus historias.
Otro, es el chisme paranormal. Es sobre todo en lugares donde no se puede ir como si nada preguntando cosas. Me quedo escuchando, o sé de algún rumor y estoy pendiente de construir esa historia desde varios puntos de vista.
Es decir, puedo hablar con una señora que vende tintos frente a un hospital y ella cuenta algo, o le escucho algo, luego eso lo utilizo con el vigilante y él puede confirmar o ampliar esa historia. En fin, es más complejo.
-¿Qué es lo más aterrador que te han enviado o contado y que te ha impactado?
A mí me traumatizan las historias de brujería. Veo tanta maldad en la gente, incluso entre la familia. Me han enviado o contado cosas aberrantes de asesinatos. De cárceles, en fin. De hecho yo no disfruto de las películas de terror, horror, nada. Me aburren. Quizás tenga alguna experiencia personal que contar con una banda de rock o de vampiros.
-También te hemos visto en algunas expediciones a lugares como el Salto del Tequendama. ¿Qué sentiste allí? Todos escuchamos un grito.
Se sintió miedo. Mucho miedo. Pero no por lo fantasmal o paranormal, sino por lo físico. Yo nunca pensé que fuera un ente o algo similar. No soy cazafantasmas y no creo en los aparatos electrónicos que captan voces del más allá. De hecho yo digo que hacemos caminatas, no exploraciones o expediciones.
-¿Te han amenazado o te han puesto en peligro por tu trabajo?
Al inicio el peligro era que te robaran, que te estafaran, que te pusieran trampas. Pero no era tan grave como hoy en día. Me amenazan de muerte, me intentan hackear mis redes, amenazan a mis familiares, y todo porque me salí del molde “investigador paranormal tradicional”. Porque no conciben que alguien que no tiene ningún don de ver espíritus, o hablar con muertos haga misterio y de esta forma tan folclórica. Varios son muy conocidos y generé un odio hacía mi contenido en este mundo de lo paranormal en Colombia, que es impresionante.
Quizás sea porque crecí en barrios populares, donde tienes que defenderte así eso te costara la vida, lo hago actualmente con estos grupos y pues no les gusto. También, por grosero o frentero.
-Has tenido lives y otras colaboraciones con creadores de contenido de misterio. ¿Cómo ha sido esto?
Sí, he colaborado con los pocos que creen y respetan el trabajo de todos. Incluso tenemos un grupo de WhatsApp llamado misterio nacional dónde está Alejandro Montoya, Horror Ipsum, Voces del terror, Nativos 1888, Horropedia, Alejandra, Valentina, Alberto acosta, entre otros. No somos famosos, somos como los marginados de la elite paranormal y que creemos en el apoyo, la colaboración, en que somos diferentes y creamos cosas muy buenas.
Somos como la Nueva Era (aunque seamos ya viejos en edad), a la que no quieren dejar surgir. Pero eso no es problema, seguimos trabajando y creyendo en nuestros sueños.
-Hay muchísimos temas en Colombia aún para explorar. ¿Qué sigue en este sentido?
De todo un poco. Yo voy trabajando en varios guiones al tiempo. Por experiencia, te cuento que muchas veces un guión o vídeo que parece estar listo para grabar, por alguna razón, se estanca. Entonces no puedo cumplir con el cronograma semanal. Por eso se trabajan varios proyectos al mismo tiempo.
Se vienen más mitos y leyendas, así como historias en otras ciudades. Espero poder publicar la gran mayoría para cumplir la meta final que es llegar a los 100k y parar.
-¿Por qué crees que creció tan rápido tu canal?
Creo que hacía falta alguien que contara nuestras historias sin copiarse de canales mexicanos, argentinos, chilenos o de estados unidos. Nunca veías vídeos muy largos con nuestras historias. Nadie daba un peso por esto, ni por nuestras historias. Se les hacía raro y aun pasa, pero creo que es necesario dejar medio granito de aporte al país.
Amo mi país y creo que somos capaces de hacer cosas increíbles. Yo todo lo grabo con celulares, pero si tuviera los recursos tendríamos mejores historias en el cine que los de estado unidos. Creo en lo nuestro, pero quizás eso no lo pueda ver yo, pero estoy seguro que servirá de inspiración para futuras generaciones que crearán cosas mejores.