Sofía Petro se desligó del dress code que se quería imponer en la posesión de su padre, Gustavo Petro. Y lo hizo a lo grande, con un traje de Diego Guarnizo que tiene enormes simbolismos y que honra a las mujeres que trabajan duro en el país para salir adelante.
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Estos son los detalles de su pinta: su chaqueta está hecha en crepé de seda, y bordada artesanalmente con técnica de tela sobre tela, donde muestra la cotidianidad de los campesinos colombianos. El top, por su parte, es un chumbe, tradicional pieza de la etnia Emberá Kamentsá.
A su vez, sus mangas tienen bordadas las frases JUSTICIA SOCIAL Y JUSTICIA AMBIENTAL, causas que defiende su padre como política de Estado.
Este bordado lo realizaron las artesanas Adriana Gómez y su mamá María Elsy Guzmán, habitantes de Ciudad Bolívar.
Estas fueron las palabras de Diego Guarnizo
El diseñador, quien hizo una colección de transformación social llamada “Feliza” que honra a las mujeres del Pacífico, se refirió de manera contundente al hablar del traje que hizo para Sofía Petro.
“Con este vestido que Sofía Petro Alcocer me permitió diseñarle para acompañar a su padre en la posesión presidencial, doy la bienvenida al nuevo gobierno. Este vestido habla de unión, de vida, de respeto, de tradición, de cultura. De Colombia. Como debe ser”, expresó.
Que el morado sea el color elegido es fundamental: ha representado las luchas feministas históricamente a nivel mundial. Esto, desde los tiempos del sufragismo y en marchas feministas como las que se han visto en México los últimos años contra los feminicidios y la impunidad que reina a su alrededor en ese país, ha sido el color más utilizado.
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Hay que recordar que gracias a Sofía, Petro comenzó a abrirse hacia el feminismo y comenzó a enseñarle sobre el mismo. Y fue el único candidato que fue a un debate organizado por colectivas feministas y LGBT.
Antonella, por su parte, usó un vestido del grupo Alado, con un chaleco de tejido Wayuú.
