Como tenía que ser, este es un gran día histórico para Francia Márquez. Más cuando luego de todas sus luchas, por fin una mujer negra llega al centro del poder en Colombia. Y para esto tenía que lucir de manera especial. Ya con looks poderosos creados por Esteban Sinisterra, fue un paso más allá con un voluminoso look que le dio aspecto majestuoso.
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Esta vez se decantó por un vestido azul, con un ribete blanco que también es complementado con este mismo material en la falda. También usó los aretes que popularizó en campaña, hechos por el mismo Esteban Sinisterra. Se trata de piezas que tienen el croquis de Colombia, de tamaño pequeño y que se pueden conseguir por 110 mil pesos con el diseñador.
Francia lució radiante e impactante. Toda una reina. Una que ha aguantado todo tipo de violencias, primero, por ser mujer, pobre y negra. Y luego por aspirar al poder, que terminó consiguiendo gracias a la gente que quiere que todas estas prácticas violentas en Colombia se acaben. Y una que ha aguantado estóica e inteligentemente todo tipo de insultos clasistas y racistas por parte de los medios de comunicación tradicionales.
Un vestido para un momento emocionante
La gente vitoreó a Francia cuando tomó su juramento, luego de que se posesionó Gustavo Petro como presidente. Luego de repetir las palabras ceremoniales de siempre, dijo algo fundamental: “Juro por mis ancestros y ancestras hasta que la dignidad se haga costumbre”.
Francia ha impactado como bandera de una nueva corriente en la política latinoamericana donde las mujeres reivindican luchas sociales, muestran su identidad y no se doblegan ante los mandatos de vestuario de un lugar por siglos masculino, tradicional y limitante en la apariencia.
Ellas brillan por mostrar cómo la moda es una industria donde caben todos y donde se transforman vidas.