Luego de que Poncho Zuleta acosara a la cantante vallenata Karen Lizarazo, ella solamente dio un escueto comunicado sobre la situación. Pero, debido a la presión de las redes sociales, este tuvo que disculparse. En cuanto a Karen, ha sufrido doble revictimización: la acusan de no “defenderse” y decir más ante el cantante.
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De hecho, una de sus defensoras principales, entre otras muchas en redes sociales, ha sido la presentadora del “Desafío”, Gabriela Tafur, quien expresó que ante el poder de Poncho Zuleta, ella no habría podido volver a cantar y esto pasa con muchas mujeres, donde el más poderoso es él:
“Entiendan que para Karen, irse de lanza en ristre contra ese hombre, es sepultar la carrera que ella misma ha construido con mucho esfuerzo, en un entorno y genero totalmente dominados por hombres. Está en una posición horrible. Un poco de comprensión y menos te victimización.”, escribió.
Por supuesto, en las respuestas a su cuenta hay hombres y mujeres que todavía le dicen que debía defenderse, pero en realidad, en un medio tan cerrado y machista, a Lizarazo probablemente no se le hubiesen abierto otras puertas. Incluso “su carrera no es lo único que habría tenido que sepultar”, le respondió un tuitero a Tafur, aludiendo a los oscuros nexos paramilitares del cantante.
“Ella sólo le habría cantado a su mamá”
Esto dicen muchas personas, que también defienden a la mujer, sabiendo que cuando hay hombres poderosos de por medio, una carrera puede acabarse al instante. Le pasó a varias acosadas por Harvey Weinstein, por ejemplo, que vieron sus carreras menguar.
Mira Sorvino no volvió a trabajar en mucho tiempo gracias a él, por ejemplo. Solo volvió de la mano de Ryan Murphy. Y esto pasó con otras actrices que el productor acosó y que se negaron a seguirle el juego. Y así ha pasado con otras mujeres en otras industrias.
“Si Karen Lizarazo reaccionaba te juro que no se monta más en una tarima a cantar”, dicen varias personas en Twitter.
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Asimismo, si la cantante se hubiese defendido, también hubiese recibido comentarios atroces de quienes defienden a Zuleta (las páginas de vallenato, para comenzar) y de hombres y mujeres que la acusan de “provocarlo”.
“Si Karen Lizarazo le hubiera pegado el puño que se merecía, los mismos que ahora defienden lo indefendible estarían tildándola de loca, histérica y aguafiestas. Como mujer, es casi imposible salir bien librada de una situación así”, expresó otra tuitera.
Entonces, esto indica que no hay que revictimizar a una mujer acosada. Hay que creerle y entender que cada quien reacciona como puede.
