Todas nuestras actividades tienen un impacto en el ambiente, y la comida no es la excepción. En los supermercados todo viene empacado, con fechas de caducidad sugeridas, dentro de cajas que además llevan una bolsa al interior. Si compras fruta o verdura a granel, la llevas en bolsas de plástico; si vas por lo orgánico, normalmente viene en embalaje. ¿Tenemos otra opción?
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Afortunadamente en Berlín existe un proyecto denominado Original Unverpackt, una tienda de comestibles que apuesta busca un cero impacto, eliminando los empaques. Este proyecto fue creado por Sara Wolf y Miena Glombovski, dos jóvenes que dejaron la universidad para seguir su sueño.
Después de 2 años de crear y ensamblar el concepto, buscaron apoyo por medio de crowdfunding — vía Social Impact Finance —, reuniendo un poco más de la mitad de su objetivo original. El cierre de la campaña fue hace un par de semanas, así que en falta poco para que este concepto sea una realidad.
Original Unverpackt tendrá comestibles frescos, como el área de frutas y verduras en cualquier supermercado, además de semillas, legumbres, frutos secos, pastas y otros de este tipo, que colocará en dispensadores a gravedad. La tienda ofrecerá contenedores reutilizables y, además, los clientes podrán llevar sus propios contenedores.
El compromiso con la reducción del impacto ambiental también se refleja en la elección de los proveedores. La tienda sólo tendrá fuentes de alimento locales, que implique un bajo uso de transporte y energía.
La tendencia hacia la eliminación de empaques
Original Unverpackt será la primera tienda bajo este concepto en Alemania, sin embargo, existen otras en el mundo. Por ejemplo, Ingredients, en Austin, Texas — que tiene una escala como supermercado—; en Londres, Unpacked hace lo propio en un espacio más reducido. Al parecer, en el caso de Original… quedará en un punto medio entre estas dos.
Estos conceptos, sin duda, nos hacen replantear nuestros hábitos de consumo y reflexionar sobre toda esa basura que se genera con los empaques. Posiblemente ahora podemos encontrar en nuestra localidad alguna tienda que se acerque a este concepto o, bien, que se pueda adaptar.
En tiendas orgánicas, naturales o de comercio justo, existe la posibilidad de venta a granel. En lugar de aceptar el producto en bolsa, hagamos ese pequeño paso de llevar nuestro propio contenedor y nuestras bolsas de manta para las compras. Es un pequeño compromiso individual que nos ayuda a reducir el impacto en el planeta. Tú, ¿tomarías ese compromiso?
