Debanhi Escobar desapareció la madrugada 9 de abril tras acudir a una fiesta y quedarse sola en medio de la carretera a Nuevo Laredo. Trece días después, su cuerpo fue encontrado en una cisterna del Motel Nueva Castilla, a unos metros de donde fue vista por última vez.
El caso ha tomado dimensiones inesperadas debido a la exposición que ha tenido sin embargo, mientras más evidencias surgen, más preguntas sin respuesta tenemos.
En los últimos días se dieron a conocer una serie de videos de cámaras de seguridad en los que se ven los últimos movimientos de Debanhi antes de desaparecer. El material fue revelado en el noticiero de Azucena Uresti y se puede ver a la joven tener una especie de altercado afuera de una de las fincas a las que asistió con sus supuestas amigas esa noche.
Otro de los videos muestra el momento en el que presuntamente Debanhi cruza la carretera hacia el motel y se asoma por las ventanas del restaurante abandonado para después correr por la parte trasera hacia donde se ubica la cisterna en la que habría caído.
A pesar de que la Fiscalía ha revelado que las investigaciones se están tratando como un feminicidio, suponen que la muerte de Debanhi se debió a un golpe muy fuerte accidental en la cabeza que la llevó a caer en la cisterna.
Las inconsistencias en las investigaciones llevaron a usuarios de redes sociales, youtubers y hasta videntes a arrojar sus propias conclusiones, envolviendo a Debanhi en teorías que sólo la revictimizan.
Los testimonios de las “amigas” y del taxista que la dejó en la carretera así como los juicios que han hecho presentadores de televisión se han sumado a la violencia detrás del caso.
Las especulaciones siguen pero Debanhi ya no puede defenderse
Las teorías giran en torno a que la joven “andaba en malos pasos”, que trabajaba como scort, que estaba en una fiesta de “gente pesada”, que había consumido drogas o que sí era una persona agresiva y conflictiva.
TikTok está lleno de videos en los que muestran su vida, los momentos junto a sus padres y la forma en la que se desenvolvía entre bailes y filtros graciosos pero también hay quienes hablan de supuestas psicofonías, manifestaciones fantasmales para crear morbo.
La sociedad está enojada con la situación, con la forma en la que se manejan los casos por lo que se hay una mayor desensibilización. Y aunque muchos son para exigir justicia, ganar likes y clics es prioridad. No hay que olvidar que México es un país donde la violencia y la impunidad imperan.
Es inevitable cuestionar lo que se nos presenta, especialmente teniendo un historial de otros casos que se convirtieron en “cortinas de humo”. Sin embargo, debemos evitar hacer juicios sobre la víctima. Debanhi y todas las muejres que son víctimas de violencia, merecen que sus casos sean tratados con verificación de datos, respeto y perspectiva de género.
La revictimización sólo minimiza la violencia que nos somete a las mujeres
En lo que va del año, al menos 62 mujeres han sido reportadas como desaparecidas en Nuevo León de las cuales 24 corresponden entre el 15 de marzo y el 15 de abril.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) informó que en lo que va del 2022 se tiene el registro de 748 mujeres desaparecidas, la mayoría del Estado de México, la Ciudad de México y Morelos.
Los cuerpos de María Jessica Karina Ramírez, María Fernanda Contreras y Victoria Guadalupe fueron encontrados pero aún falta dar con el paradero de Yolanda Martínez y muchas otras mujeres y niñas cuyas fichas siguen circulando.
