Bennett Kaspar Williams es un hombre de 37 años de edad que el año pasado dio a luz a su primer hijo. Dado a lo poco usual de su caso, encontró que en muchas ocasiones personas lo llamaban ‘mamá’ durante todo su embarazo. Esta situación lo hizo pensar que las personas aún relacionan el embarazo como una situación inherente a las mujeres y decidió hacer algo al respecto.
En una entrevista con The Daily Mail, Bennett dijo que hace diez años comprendió que era un hombre trans, sin embargo su transición comenzó tres años después.
En 2017 conoció a Mlik, su ahora esposo, con quien se casó en 2019. Ambos supieron que deseaban ser padres y juntos decidieron que Bennett diera a luz a sus bebés. Esto significó que tuvo que interrumpir su terapia hormonal de testosterona.
Para Bennett la decisión de embarazarse no fue nada fácil, pues al haber pasado varios años transicionando, el embarazo significaría cambios en su cuerpo que podrían impactar su salud mental.
“Siempre supe que existía la posibilidad de que mi cuerpo lograra un embarazo, pro no era algo que quisiera hacer hasta que aprendí a separar la función de mi cuerpo de cualquier noción de género.”
Es decir que para Bennett, su identidad de género no depende de cómo se vea su cuerpo y lo que puede hacer, para él es una herramienta para poder convertirse en padre.
Uno de los argumentos que Bennett tiene para dejar de asociar el embarazo con la feminidad, es que no todas las personas que tienen un útero pueden concebir, por lo tanto la feminidad no puede medirse en términos de maternidad.
En 2020, Bennett descubrió que estaba embarazado. Sin embargo la pandemia complicó las cosas para su familia, ya que para Bennett era importante mantener a su bebé a salvo.
Finalmente en 2020 dio la bienvenida a su hijo, Hudson. Sin emabrgo mientras estaba en el hospital sufrió discriminaciones debido a que el staff frecuentemente lo llamaba por el género incorrecto y se referían a él como ‘mamá’.
Bennet se dio cuenta de que el embarazo, es una forma de negocio para el sctor salud, ya que de acuerdo con él, toda la institución de atención del embarazo en Estados Unidos se centra en vender un concepto de ‘maternidad’, estrelazado con el género.
Para él era extrano que a pesar de tener una barba tupida y pecho plano, los especialistas insistieran en llamarlo ‘mamá’, ‘señora’ o ‘madre’.
Su experiencia como padre ha sido muy enriquecedora para él, ya que afirma que los niños están despejados de prejuicios y para su hijo es muy natural tener dos padres.
Cuando crezca, Bennett le contará a su hijo sobre cómo lo cargo en su vientre y dio a luz, para él no hay nada de extraño el haber tenido a su hijo como muchas otras personas.
Actualmente Bennett vive junto a su hijo y su esposo y frecuentemente comparte fotos en redes sociales para derribar estereotipos de género y de familias tradicionales.