La violencia machista en México va en aumento. Mientras el país lidia con una crisis que empeora, una nueva generación de feministas está cobrando fuerza.
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Junto a los últimos movimientos que se han gestado en el país, han surgido nuevas iniciativas que permiten una mayor conversación sobre el tema de la violencia.
Durante su segundo informe de gobierno, Claudia Sheinbaum informó que envió al Congreso de la Ciudad de México una iniciativa para que cuando una mujer sea violentada por su pareja, la ley obligue al agresor a abandonar el domicilio.
“No tiene porque enviarse a una mujer y a sus hijos a un refugio, debe ser la propia vivienda en donde vive donde tenga la mayor seguridad y el agresor debe salir de esa vivienda”, declaró.
Sheinbaum reiteró que desde el 25 de noviembre de 2019 se decretó la Alerta de Género en la Ciudad de México. Hace unos meses, el secretario de Seguridad, Alfonso Durazo Montaño, aseguró que de los feminicidios acumulados durante el 2020, se logró bajar este delito en un 3.5% respecto al año pasado, pero que de enero a junio se ha incrementado un 7.7 por ciento. El feminicidio, homicidio culposo, lesiones dolosas y/o culposas, secuestro y trata de personas repuntaron hasta alcanzar en conjunto 6,049 víctimas en junio.
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Según señaló la jefa de gobierno, hasta la fecha las abogadas encargadas de atender a mujeres que denuncien violencia, se han atendido 74,753 casos, levantado 13,151 carpetas de investigación, y apoyado 469 medidas de protección.
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Sheinbaum Pardo remarcó que el 25 de noviembre del 2019 se decretó la Alerta de Género en la capital del país y que, además, en octubre se informará sobre las acciones que se han realizado sobre el tema.
“El próximo mes estaremos informando los avances que nos propusimos para erradicar la violencia hacia las mujeres. Destacó hoy la aprobación por este Congreso de tres leyes: la creación del banco de ADN, el registro de agresores sexuales y la ley Olimpia”, dijo.
De acuerdo con la propuesta de ley, «se busca que las mujeres y sus hijos permanezcan en el hogar, sin importar que el agresor sea el propietario o arrendatario. El agresor deberá desocupar la vivienda inmediatamente y será obligado a pagar la renta y cumplir con los compromisos económicos que brindaba antes».
A pesar de que parece una buena propuesta y una medida NECESARIA, tiene sus contras ya que se sabe que las órdenes de protección para víctimas de violencias no han sido funcionales porque no se aplican correctamente. Basta con recordar la llamada Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia que sigue sin aplicarse.
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Durante la reciente toma de la CNDH por parte de familiares de víctimas de violencia y grupos feministas, previo a los festejos patrios, se alegó que no se les estaba dando el seguimiento adecuado a muchos casos debido a que todo se queda en «carpetas de investigación».
Otro problema en torno a esta medida es que la violencia no termina con una denuncia. Muchas mujeres siguen siendo agredidas por sus parejas. Mientras la ley sea aprobada, éstas seguirán viviendo bajo el mismo techo o serán arrojadas fuera y aún cuando se apruebe, faltaría que se aplicara correctamente y sin largas.
La revictimización y falta de credibilidad por parte de los policías a las víctimas que denuncian casos de violencia también evitan que se tome acción.
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