En México se están cometiendo 10 feminicidios al día. Es decir, se asesinan a diez mujeres por el solo hecho de su género. Son sus parejas, sus ex parejas, sus familiares, y desconocidos que saben que tienen total impunidad en un país que no nos cuida.
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Los casos quedan impunes, ellos quedan justificados, y quienes son cruelmente asesinadas terminan siendo culpadas por el sistema. El domingo 9 de febrero, Ingrid Escamilla fue brutalmente asesinada.
Ella tenía 25 años, y su pareja sentimental la desolló, tiró sus órganos en bolsas de basura, y su piel apareció a unas cuadras de su casa. Dicho feminicidio se volvió el protagonista de los medios quienes no dudaron en lucrar con él.
Poco parecía importarles informar a los mexicanos, hacer conciencia o hacer justicia al nombre de Ingrid. El caso sirvió para fines completamente comerciales y no dudaron en filtrar las imágenes de la joven y el video del asesino.
Aunque la Jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum condenó la filtración del video de Eric Francisco de 46 años, éste fue visto por millones de personas. Asimismo, es preocupante la poca educación que hay alrededor de un país que tiene uno de los índices de feminicidios más altos de América Latina.
En los comentarios se aprovechó a culpar a Ingrid por la elección de su pareja y por la diferencia de edad. También, los medios hicieron hincapié que ellos vivían una relación violenta como si eso minimizara que ella perdió la vida desollada por Eric Francisco.
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No todas las personas tienen las mismas herramientas para identificar una situación violenta, y aunque las tuvieran no tendrían por qué ser señaladas por quedarse en una.
La culpa no es de Ingrid Escamilla por elegir mal a su pareja, la culpa es de Eric Francisco por desollarla, es del sistema por no protegerla, es del machismo que permite que 10 mujeres al día sean asesinadas y es de la impunidad que se vive todos los días.
