Ponerse uñas es una práctica común para muchas mujeres; sin embargo, una mala praxis puede ocasionar problemas graves, tal como le pasó a una mujer en Tuggerah, Australia, quien estuvo a punto de perder un dedo tras aplicarse uñas postizas.
En un post en Facebook la víctima alertó a otras mujeres sobre los riesgos para la salud al implantarse este tipo de uñas.
«He estado yendo recibiendo mis acrílicos y pedicuras durante años sin ningún problema, y seguí volviendo porque encontré que eran los más amistosos (…) He estado feliz con mis uñas durante años y nunca he tenido ningún problema; sin embargo, después de mi último relleno hace un par de semanas, mi dedo comenzó a inflamarse y fue bastante doloroso acerca de una semana después de mi relleno», relató.
Luego, añadió, «el dolor se puso muy mal y fue a ver al médico (…) Me enviaron a casa con antibióticos y una referencia para ver a un médico de mano».
Dolor intenso
Pese a tomar los antibióticos, la hinchazón en la punta de su dedo había empeorando. Incluso botó pus del dedo.
El dolor era insoportable y la hinchazón se había extendido de nuevo así que volvió al médico.
«Al final del día me dijeron que necesitaba una cirugía para limpiar la infección (…) Me operaron para limpiar la infección y me fue bien», relató.
La afectada indicó que el propósito del post es advertir a los demás lo que puede pasar después de que se hagan las uñas en los salones de uñas.
«Nunca he tenido un problema previamente en pearl nails tuggerah y siempre los he recomendado a cualquiera que pregunta, sin embargo, en retrospectiva mirando hacia atrás no recuerdo que sus prácticas de higiene sean demasiado grandes. Las herramientas se toman con cada técnico de uñas de cliente a cliente, sin evidencia de esterilización entre los clientes. No me había preocupado realmente por pensar que nada malo pasaría…. hasta ahora!!! Sólo quiero asegurarme de que nadie pasa por lo que he pasado», remarcó.