Una de las cosas que más subestiman las personas es la calidad del aire que respiran y se trata de todo un tema fundamental. Una reciente investigación arrojó que la calidad del aire en los Estados Unidos puede estar relacionada con una mayor mortalidad y una menor esperanza de vida.
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Así lo explicaron científicos del Imperial College London y del Centro para el aire, el clima y las soluciones enérgéticas de la Universidad Carnegie Mellon.
El estudio, publicado en la revista PLOS Medicine, analizó las concentraciones de partículas finas en el aire, llamadas PM2.5, en todos los condados de los Estados Unidos (excluyendo Alaska y Hawai) entre 1999 y 2015, reseñó el portal Science Daily.
Estas partículas se emiten principalmente en automóviles, centrales eléctricas e industrias, y se sabe que son peligrosas para la salud. Las diminutas partículas, aproximadamente 30 veces más pequeñas que el ancho de un cabello humano, pueden inhalarse profundamente en los pulmones y se han asociado con un mayor riesgo de una variedad de afecciones, como ataque cardíaco y diversas formas de enfermedad pulmonar.
La calidad del aire que respiramos es preocupante
La nueva investigación muestra que a niveles entre 2.8ug / m3 y 13.2ug / m3 de esta partícula, que en su mayoría está por debajo del estándar actual, la contaminación del aire se asoció con un estimado de 15,612 muertes en mujeres y 14,757 muertes en hombres. Las muertes se debieron a afecciones cardiorrespiratorias, trastornos cardíacos y pulmonares.
Estas muertes reducirían la esperanza de vida nacional en 0,15 años para las mujeres y 0,13 años para los hombres. La pérdida de la esperanza de vida debido a PM2.5 fue mayor en Los Ángeles y en algunos estados del sur, como Arkansas, Oklahoma y Alabama.
El profesor Majid Ezzati, autor principal de la investigación de la Escuela de Salud Pública de Imperial, dijo: “Hemos sabido por algún tiempo que estas partículas pueden ser mortales. Este estudio sugiere que incluso en concentraciones aparentemente bajas, en su mayoría por debajo de los límites actuales, todavía causan decenas de miles de muertes”.