Cuba afronta una tragedia de las más grandes en su historia. Un avión que recién despegaba del aeropuerto José Martí de La Habana se ha estrellado con 105 personas a bordo, entre pasajeros y tripulantes. Todos son extranjeros.
El avión Boeing 737 fue alquilado por Cubana de Aviación a la empresa Global Air y tenía como destino la ciudad de Holguín, al extremo este de la isla de Cuba, a unos 800 kilómetros de La Habana.
«El avión es un amasijo de hierros y otros materiales calcinados. Cayó sobre una siembra de boniatos (un tipo de tubérculo), a 200 metros de las primeras edificaciones. Carros cisterna apagaron el fuego. Una veintena de ambulancias se mueven en el lugar», relató un periodista de la agencia AFP.
El avión cayó en el campo, en una zona de cultivos de boniato. Las primeras imágenes muestran al avión destrozado y calcinado. Sin embargo, las autoridades ya han reportado tres supervivientes hospitalizados, aunque en estado crítico. Entre los 105 pasajeros extranjeros se reporta la presencia de un bebé de dos años y otros cuatro niños.
Desde el lugar de los hechos se desprende una gran columna de humo. El nuevo presidente de Cuna, Miguel Díaz-Canel, se ha acercado al lugar de la tragedia. » Las noticias no son nada halagüeñas, parece que hay un alto número de víctimas «, aseveró desconsolado.
‘Granma’, el diario oficial de Cuba lo ha reseñado así: “Un Boeing 737-200 arrendado por Cubana de Aviación, con tripulación extranjera y 104 pasajeros a bordo, que hacía el recorrido desde La Habana a Holguín en el vuelo DMJ 0972, en el momento del despegue se precipitó a tierra entre el aeropuerto José Martí y Santiago de Las Vegas”.
Los cuerpos de seguridad de la isla están avocados a atender la tragedia que marca un día oscuro en la historia de Cuba.