Terminar una relación no siempre es fácil… Más bien, nunca.
Entre lo peor que puede pasarte está: sentirte triste o desganada, dormir demás, no poder concentrarte en el trabajo o en clases, echar de menos a esa persona e incluso rogarle a esa persona. Pero casi nunca nos ponemos a pensar en todas las buenas cosas que no están pasando en ese momento.
Sí, buenas cosas. He aquí una lista con diez de ellas:
- Eres libre. No tienes que consultar tus decisiones con nadie. Tú decides hacia donde y, más importante, por qué. Y no estoy diciendo que en el amor no tengas libertad, sino que es en este momento en el que tus acciones sólo te afectan a ti misma.
- Come rico. Sí, ocupamos mucho el pretexto de estar deprimidas por la ruptura para comer helado, tragos exóticos, pastas y también postres. Pero, digo, ¡qué rico! Olvida este pretexto y tan sólo disfrútalo.
- Oficialmente puedes conocer a más personas. No estoy diciendo que te pongas en el mercado de la soltería apenas dos días después,
- Es el momento crucial para lucir guapísima. Claro, mucho se dice que es “por si te encuentras al ex,” pero una vez que esos zapatos de tacón alto con esa blusa hagan complemento con tu cintura, ¡ni quién se acuerde de él!
- Ve chick flicks. ¡Pero disfrútalos! Llora por Rachel McAdams y Channing Tatum (en The Vow), no por ti.
- Reúnete con amigos. Seguramente los tenías un poco abadonados y, si esquivas un poco las clásicas incómodas preguntas, les darás mucho gusto volver a verte.
- Sé coqueta. Ser soltera te da la libertad de sonreírle al apuesto chico del café, ¡aprovéchalo!
- Tendrás tiempo extra para adelantar pendientes de la escuela o el trabajo. Estudia o repasa el informe que debes desde hace un tiempo. El interés comienza con el éxito.
- ¡Cómprate ropa! Es momento de cambiar de look e intentar algo nuevo, algo que jamás te hubieras atrevido.
- Y, finalmente, lo mejor de terminar una relación es que te diste cuenta de que en tu vida había una persona que no merecía estar en ella.