Pareciera que en el 2013 oficialmente, sacarse la ropa y bailar excesivamente sexual bajo el ojo público de todo el mundo está de moda. De lo contrario, la modelo Emily Ratajkowski no sería alabada como la Mujer del Año.
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Tras el baile erótico de Miley Cyrus en los MTV Video Music Awards de este año, varias celebridades han tratado de llamar la atención como Rihanna con sus fotografías inapropiadas para la cultura árabe en Abu Dabi. Sin embargo, bailar topless en un video de música fue lo que transformó la vida de Ratajkowski.
No sólo porque seguramente sus padres deben estar avergonzados – sus abuelos, hermanos, yo, etc. -, sino también porque gracias a su desnudo logró hacer una campaña para la marca Rag and Bone (de sus pocas fotos con ropa), se adjudicó la portada de la revista GQ posando orgásmicamente con comida, filmará una película junto a Ben Affleck y ahora superó en votos a Jennifer Lawrence coronándose como la mujer del año según la revista Esquire.
Pero entonces… ¿Qué la hace ser la mujer del año?
¿Tener un buen par de tetas y moverlas para que todo el mundo las “goce”? ¿Se supone que eso contribuye a la empoderación femenina? ¿A la liberación sexual de nuestro género?
En mi mera opinión, Ratajkowski es una burla al movimiento FEMEN, quienes luchan contra el machismo y sexismo a nivel mundial desde sus inicios en Ucrania. Me avergüenza que sea mujer – aún más que sea la elegida como mujer del año.
De la canción en la que tan libremente menea sus tetas, creo que el verso que mejor la define: “You the hottest bitch in this place” (Eres la perra más caliente del lugar).
Si aún no han visto sus tetas, les dejo el video de la canción ‘Blurred Lines‘ de Robin Thicke – sí, el mismo que punteaba a Cyrus en los VMA’s al puro estilo twerking.