Obvio, es rico tomar, sobre todo en alguna fiesta con los amigos, donde el vino-en mi caso- nos ayuda a sentirnos más desinhibidas. Pero debo confesar que no soporto a los tipos que ocupan como excusa el que estaban pasados de copas como para ocultar todo lo que hicieron contigo.
Por obra y gracias, olvidan que te dieron besos, que te sacaron la ropa e incluso te ignoran o hacen como si nada hubiese pasado. Tengo plena confianza en que esas lagunas mentales no existen, a no ser que el pobre hombre esté en un estado en el que no se puede ni parar.
Hace algunos años, cometí el gran error de caer en la tentación con un buen amigo. De esos típicos compañeros de carretes, medio mujeriegos y al que le sabes todas sus andanzas. Antes de que pasaran cosas, todo iba bien y relajado, pero luego del sexo, todo se complicó.
Creo que terminé por odiarlo. Porque noté que luego de lo que pasó siempre se hizo el tonto y cada vez que podía decía frente a mí y a sus amigos, que jamás recuerda lo que hace luego de emborracharse.
Simplemente creo que es una excusa o una forma de hacerse los macho alpha. Lo detesto. Son de esos típicos hombres inmaduros que no tienen idea cómo llevar una relación sin compromisos y juran que una se enamora, por lo mismo ocupan como excusa el “no me acuerdo, estaba borracho”.
Y tú ¿tienes alguna experiencia?