-Susan Crandell, asesora de Match.com, editora y fundadora de la revista More y autora de Pensando en el mañana: reinventándote a ti misma en la mediana edad, nos entrega secretos de las citas cunado ya somos mayores.
“No me malinterpretes”, dice Susan. “El amor es increíble a cualquier edad. Pero tener citas durante la mediana edad puede, en particular, darnos escalofríos. Cuando comencé a entrevistar a gente para mi libro “Pensando en mañana: reinventándote a ti misma en la mediana edad”, quedé encantada por descubrir que el amor aún está en el aire. Los hombres y mujeres se divierten juntos, saborean el romance y descubren el amor verdadero”, agrega.
Tan sorprendida quedó esta autora, que quiso compartir con nosotros las experiencias de esas parejas que entrevistó. Aquí van algunas sorpresas:
La gente es buena, muy buena
¿Recuerdan el capítulo de “Sex and the city” cuando Berger termina con Carrie con una nota? Esto nunca habría sucedido si estuvieran en su 50’s. A esa edad las personas pueden ser falsas, pero ninguno es malo. A los 2’0 y los 30 en cambio, la gente evadiría una cita, o si fuera una cita a ciegas, pasaría de largo si no la encuentran a la altura de sus expectativas estéticas. Para cuando se tienen 5 décadas, el juego ha cambiado: las personas devuelven las llamadas.
Puedes revivir el sentimiento de tu primer amor
A esa edad, las personas piensan y siente como cuando se enamoraron por primera vez: mareado, loco, maravillado… y con eso llega un gran “déjà vu”. Sucede principalmente porque el amor en esta época, como a los 15 años, llega de sprpresa. No lo esperamos y un día nos damos cuenta de que nos encanta nuestro amigo. Los mayores de 50 creen que paar ellos la etapa pasó y que el amor terminó, pero es todo lo contrario, ese estado los convierte en adolescentes de nuevo.
Te sientes cómodo con tu sexualidad
Gail Sheehy, autora de “El sexo y la mujer madura”, dice, según sus experiencias en charlas y entrevistas con “cincuentones”, los hombres y mujeres a esas edad tienen muchos menos complejos que los jóvenes y se sienten con total libertad para hablar de vibradores y orgasmos, porque están disfrutando la vida sin las preocupaciones o responsabilidades de los más chicos.
Nadie se pelea por cosas pequeñas
No les cuesta hacer un compromiso, porque el ego es mucho más fuerte de lo que era a los veinte años. A los 20 años, todo compromiso se siente, un poco, como renunciar a una parte de nosotros mismo. A los 50 en cambio, dejan que la pareja elija el restaurante. Sólo dicen “qué más da, nada es al 100%”.
No es necesario cambiar a la otra persona
Lo peor es decir, a los 20, “cásate con él ahora y lo modelas después”. No se puede. A los 50 años, después de media vida, la gente es mucho más segura, inteligente, nadie lucha con su propia identidad, tampoco una pelea con tu trabajo o carrera… en definitiva, lo han pasado mucho mejor porque tienen más camino recorrido.