El mundo del lujo está lleno de excentricidades, donde la locura da rienda suelta la imaginación de empresarios que no escatiman en gastos cuando se trata de alguna curiosidad costosa.
PUBLICIDAD
Si hace unos años fue noticia el cupcake de oro, ahora el restaurant neoyorkino Manila Social Club– el cual está ubicado en Hope Street, en Brooklyn – ofrece a sus clientes la “donut o rosquilla de oro”.
El novedoso postre consta de un relleno de jalea, untado con champagne cristal y, como toque final, posee incrustaciones de oro de 24 quilates, por lo que es totalmente comestible. Y su costo también está a la altura de su excentricidad, ya que adquirir uno de éstos le costará 100 dólares.
Según detalla el medio Mashable, desde que abrió en abril, el restaurante ha desarrollado un culto por sus postres excéntricos como las donas. Por ejemplo, la dona “Ube Bae” que se hace con un tubérculo muy popular en Filipinas llamado “ñame de agua”, tiene un costo de 40 dólares sólo una de estas.
Björn DelaCruz, dueño del restaurante filipino, dijo que él no estaba tratando de hacer deliberadamente una dona costosa, sino que fue algo que sucedió naturalmente:
Para mí, es brillante y es de oro, pero se trata de algo que se desarrolló en conjunto para lograr un gran rosquilla, así tan loco como suena. Hubo un momento en que yo estaba comiendo esta rosquilla mientras bebía champagne y dije : ‘Oh, esto es una gran combinación!’
Aunque la rosquilla de oro fue incluida originalmente como un especial de vacaciones, DelaCruz dijo que la abrumadora demanda le inspiró para agregarla como un elemento del menú regular:
No sabía que la gente iba a venir a pedir una docena a la vez. Pero es Nueva York y hay gente que está dispuesta a pagar una gran cantidad de dinero de estas donas de oro