Decidiste empezar tu dieta y te ha ido de maravilla. Tu plan de comer sano está funcionando y ya puedes ver resultados en tu cuerpo, pero llega el fin de semana y te tienta la idea de salir de fiesta y tomarte unos cuantos tragos.
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¿Qué hacer en ese caso? Por un lado, quieres mantener tu plan de adelgazamiento porque ha sido efectivo. Por otro, sabes que el alcohol puede jugar en contra en este proceso y te da miedo sentir que tu esfuerzo ha sido en vano.
La buena noticia, es que estar a dieta no tiene por qué implicar que te prives de tomarte un trago de vez en cuando, lo importante es elegir aquellas bebidas alcohólicas que sean bajas en calorías y en azúcar.
Lo primero que debes saber es que mientras más grados de alcohol tiene una bebida, mayor es el número de calorías que se van a consumir. Los tragos como el whisky, el ron o los destilados son muy calóricos y por lo general, los médicos recomiendan evitarlos si se quiere adelgazar.
¿Cuál es la diferencia entre las calorías del alcohol y las de los alimentos? Las calorías del alcohol son “vacías”, es decir, aportan una gran cantidad de energía calórica pero no contienen nutrientes que puedan ser utilizados por el cuerpo.
Al ser “vacías”, el cuerpo asimila estas calorías como una energía extra, y en vez quemarla durante el día, la tiende a guardar y almacenar como grasa.
Además, nuestro organismo requiere de grandes cantidades de vitamina B para degradar el alcohol, y ante la posibilidad de un déficit nutricional, prefiere almacenar esa energía.
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¿Qué tomar si se está a dieta?
Si tienes el cumpleaños de tu mejor amiga y mueres por brindar con ella, puedes hacerlo, pero tienes que ser sabia en la elección de la bebida que vas a tomar.
Los tragos ideales para consumir cuando se está a dieta son, por ejemplo, el vino tinto, vino blanco, los espumantes y la sidra. Al tener menor graduación alcohólica, estas bebidas tienen menos calorías y no impactarán mayormente en tu peso si las bebes con moderación.
Si te gustan los tragos un poco más fuertes, puedes tomar un vaso de vodka con alguna bebida dietética. A pesar ser considerado como un licor fuerte, el vodka tiene muchas menos calorías que el whisky o el ron.
Lo que sí es importante considerar, es que no porque tenga menos calorías vas a poder tomarte cinco copas de champaña sin problemas. Considera que tener una vida sana es algo bueno que estás haciendo por tu cuerpo, y eso también debe incluir un cambio en tus hábitos de beber.