Lejos de pensar que es lo peor que podría ocurrirnos, debemos de tomar las cosas de diferente manera. Quizá aceptar que nuestro final feliz nada tiene que ver con una relación de pareja convencional.
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Así es que, para empezar, he aquí ciertas cosas que podrías poner en práctica:
Analiza la situación
Antes de tomar al toro por los cuernos, sería bueno darnos cuenta de si realmente estamos tratando con un toro.
Ya sea que estés en una relación de sólo sexo con ningún tipo de compromiso con tu amigo o genuinamente estés a gusto con alguien que te agrada, debes de tomar en cuenta cuál es la situación. En muchos casos, puede que estés contenta sin necesidad de aspirar a un amor romántico.
Toma en cuenta cómo te está afectando
Como ya dijimos, puedes estar contenta sin necesidad de acabar con la relación casual que estás sosteniendo. Y mucho menos intentar que ésta se convierta en una comprometida.
Sin embargo, si esta relación no es lo que buscas ni tampoco complementa con tus necesidades, es importante que termines con ella.
Sé honesta
Una vez que hayas aclarado tu mente, va el momento de la acción. Si estás feliz, esta parte te será placentera.
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Pero si no, lo más indicado es que hables con la otra persona y aclares tu punto de vista a la vez que menciones qué es lo que tú quieres. No se necesita “terminar con la amistad,” se puede tan sólo ser honesto.
Rompe con el cliché
Es importante entender que las relaciones casuales no son el enemigo. Se puede estar happily undercommitted sin necesidad de buscar cambiarlo ni a corto ni a largo plazo.
Evita lo que no quieras que vuelva a ocurrir
En caso contrario, claro, puedes tomar en cuenta lo que está saliendo mal con tu vida amorosa. Es decir, dar pie a relaciones que no te mantienen satisfecha.
Por ejemplo:
- Acceder a tener sexo sin ningún tipo de compromiso e indefinidamente. Esto puede dar paso a que este tipo de casi relación se extienda, dejándose así insatisfecha.
- No dejar claro qué tipo de relación es la que buscas desde un principio. Quizá no es exactamente lo mejor desde la primera cita, pero es conveniente que la persona esté al tanto de qué es lo que buscas.
- Esperar que las cosas (o, pero aún, las personas) cambien. Las dinámica relaciones, así como lo que las otras personas encuentran en ti, no son cosas que podamos cambiar de la noche a la mañana. Ni siquiera con algún proceso recomendado por algún libro de autoayuda.
- Aceptar una relación sin compromisos y, después, arrepentirse. Enamorarse de una persona que no te deja la posibilidad de encontrar un amor romántico, suele ser casi siempre la razón por la que las relaciones sin compromiso se complican. Es importante saber en qué tipo de relación estás desde el principio.