La gente compra mascotas como si fueran objetos sin tener en cuenta que es una boca que alimentar y un individuo del que deberán hacerse cargo por varios años. Muchos animales son abandonados sólo porque sus dueños ya se aburrieron de cuidarlos. Para tener una mascota hay que desearlo de verdad, elegir un compañero no debería tener precio.
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Chicago nos da un ejemplo a seguir, pues su ayuntamiento aprobó una ley que entrará en vigor el próximo marzo que prohíbe a las tiendas de mascotas vender perros, gatos y conejos de criadores comerciales, los animales tendrán que venir de un refugio. Esta medida servirá para promover la adopción de animales así que diferentes refugios pondrán a la vista a las mascotas para que puedan tener un hogar.
Tú compras un cachorrito sin tener idea, la mayoría de las veces, de dónde vino. Puede ser que con tu dinero estés contribuyendo a la explotación de estos animales sin saberlo. Las fábricas de mascotas son pequeños infiernos en tierra.
El problema de los criaderos de animales es que, como cualquier otra actividad comercial en la que se involucran animales, sus derechos no valen, los explotan y los hacen vivir en celdas diminutas donde los privan de sus libertades para ser tratados como máquinas de cachorros.
A menudo son mal alimentados, son animales infelices que no pueden correr y jugar con sus compañeros. En su afán de criar a los mejores ejemplares, los criadores contribuyen al aumento de problemas genéticos en los animales que desarrollarán efectos secundarios a lo largo de sus vidas.
Las consecuencias de cruzar a perros de una misma familia en estas fábricas también se traducen en enfermedades complejas que los aquejarán durante toda su vida o acabarán con ella. Todo esto debe parar y adquirir mascotas de una forma más humana.
Una mascota no es un adorno para tu casa, he visto cantidad de muchachas con sus perros en carísimos bolsos paseando por los centros comerciales como si se tratara de un accesorio. Las he visto sentarse a comer y guardarlos el resto del tiempo en sus bolso transportador sin poder moverse porque ladran y hacen incómoda la plática.
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Un perro no es una persona pero no habrá persona que te espere en casa con la emoción de un perro. No importa el tiempo lo dejes solo, ni que se te olvide darle de comer, que no lo saques a pasear o le grites muchas veces, un perro siempre va a estar feliz de verte, eso no se compara con nada y no necesita ser de raza para ser muy especial.
La felicidad de tener un nuevo compañero de vida es la misma si es de raza o no. Si quieres tener una mascota piensa antes si podrás hacerte cargo de todo lo que implica y cuál es la más adecuada para tus condiciones de vida. Cuando vayas a adquirirla prefiere siempre la adopción, debemos frenar la fábrica de mascotas y esta es una medida que valdría la pena copiar.
Fuente: Ejemplar: En Chicago prohibieron la venta de cachorros para fomentar las adopciones (Gamba)