El pasado 22 de marzo, en el marco del Día Mundial del Agua, las 13 abuelas indígenas se reunieron en el Pozo de Montezuma, con un propósito: unirse en oración por la sanación y la purificación de nuestras aguas.
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Las abuelas son originarias de distintos puntos de la Tierra. Desde las tribus Hopi en Arizona, Estados Unidos; los Tamang, de los Himalaya en Nepal; los Mazatecas, de Huatla de Jimenez, en México; la Amazonia Brasileña, en América del Sur; hasta los Omyene, del África, y los Yup’ik, del Círculo Polar Ártico. Todas ellas recibieron un mensaje profético para actuar en favor de uno de nuestros más preciados recursos.
Así de reunieron, estas sabías abuelas, en medio de oraciones, cantos y bailes a la Madre Tierra. Un poderoso ritual en honor al agua, un elemento que se encuentra presente en nuestro Planeta en un 70%. Ese mismo preciado líquido que la humanidad ha contaminado con sus acciones, con accidentes nucleares, derrames petroleros, descargas industriales.
“Vivimos en agua en el vientre de nuestra madre […] No es coincidencia, las abuelas dicen, que la Tierra tenga el mismo porcentaje de agua que el cuerpo humano.” ~Abuela Hopi, Mona Polacca
La bendición del Agua de la Madre Tierra es el principio de un cambio más grande, una misión que corresponde a cada uno de nosotros. Como lo hemos comentado, el agua es un derecho humano que damos por hecho — cuando en otras partes del mundo, existen comunidades donde su acceso es restringido o, bien, ha sido contaminado.
Además de tomar acciones para el ahorro y el cuidado del agua, las 13 abuelas indígenas asignan una importante tarea a toda la humanidad: pedir una disculpa por la contaminación y el desperdicio y, así, dar gracias al agua. Este fue el ritual recomendado por las abuelas…
Prepara un recipiente con agua limpia o colócate a lado de un cuerpo de agua.
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Nuestras vibraciones pueden sanar al agua y a nuestra Madre Tierra. Es hora de despertar, compartir la información y trabajar por el bien común, por el bienestar de nuestro hogar. En esta misión, cada acción cuenta. Si no eres creyente, si no estás acostumbrado a orar, no importa. Con afirmaciones y una buena intención basta para que juntos, garanticemos el agua a las futuras generaciones.
Fuente: World Water Day: March 22nd 2014: Prayer for the healing of our Waters (Mystic Mamma)